La moderación del alza del precio del transporte público anunciada por el Gobierno ha sido profundizada por el Ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz. Esta medida se tomó después de que el panel de expertos anunciara un aumento de $20 pesos para adultos, $10 para estudiantes y $10 para adultos mayores. Sin embargo, el alza final será de solo $10, mientras que el resto del incremento se mantendrá congelado.
El panel, cuya existencia está regulada por ley, había propuesto el alza basándose en los costos que implica el servicio. Esta propuesta llevó a conversaciones con el Presidente Boric, quien estaba preocupado por el impacto de este aumento, especialmente durante un invierno tan duro como el que se ha experimentado en Santiago. El Presidente solicitó que se buscaran mecanismos o alternativas para suavizar el alza.
Como resultado, el Gobierno decidió «inyectar recursos al sistema», de modo que el alza sea solo de $10. Además, se decidió que la tarifa escolar, la tarifa para adultos mayores y el monto máximo mensual se mantengan congelados en los niveles actuales.
El Ministro Muñoz explicó que la cartera de Transportes había contemplado la posibilidad de que el panel de expertos propusiera el alza. Tenían contemplado resolver esta situación de la manera en que finalmente se decidió. El Ministerio de Hacienda es el que dispone de los recursos necesarios para poder inyectarlos al sistema.
Los recursos del Gobierno o del país no son infinitos, y por lo tanto, se requiere un equilibrio delicado y difícil. En concreto, limitar esta alza parcial de $10 va a significar, de aquí a fin de año, un poco menos de US$ 6 millones.
Además de Santiago, otras ciudades como Iquique, Limache, Quintero y el Gran Valparaíso, Rancagua, Linares, Chillán, Valdivia y Villarrica, también tendrán un alza de $10. Sin embargo, si después del fin de año la tarifa permanece al nivel actual, estos recursos no se recibirán para cubrir los costos que el sistema enfrenta. Estos son recursos que se necesitarán más adelante.
El Ministro subrayó que el subsidio al sistema de transporte público no es sinónimo de ineficiencia. Los países desarrollados subsidian significativamente el transporte público porque entienden que es importante para el bienestar de las ciudades.
El Gobierno entiende que, tras el congelamiento desde el estallido social y los aumentos progresivos que se han ido realizando, las tarifas no pueden permanecer congeladas para siempre. El sistema requerirá cada vez más recursos, ya que los costos reales del sistema comenzarán a desacoplarse de los ingresos.
Si bien este Gobierno ya ha registrado tres alzas (que suman $30 a la fecha), no se descarta que el aumento continúe produciéndose. En este caso, se intentará hacer un buen balance entre lo que significa el costo de la vida, especialmente para los más vulnerables, y los recursos que el sistema requiere.
En el caso de las regiones, para ciudades como Iquique, Limache, Quintero y el Gran Valparaíso, Rancagua, Linares, Chillán, Valdivia y Villarrica, la alza se limitará a $10. Esto es a pesar de que en algunas zonas, como el Gran Valparaíso, lo que correspondía era $40 porque no se hizo alza en febrero. Sin embargo, se mantendrá en $10, entendiendo que las razones que se argumentan para Santiago también son válidas allí.