El caso del italiano Giacomo Bozzoli ha tenido un nuevo capítulo. El hombre, quien estaba condenado a cadena perpetua por homicidio, ha sido finalmente descubierto, no escondido en algún rincón remoto del mundo, sino en su propia casa. Bozzoli, quien había logrado eludir a las autoridades por un tiempo considerable, fue encontrado escondido bajo una cama en su casa.
Bozzoli, de 39 años, ha sido trasladado a la prisión ‘Cant Mombello’ de la ciudad italiana de Brescia (en el norte del país), según informaron los medios locales la noche del jueves. La captura marca el final de una larga búsqueda que había llevado a las autoridades hasta España.
El Tribunal Supremo confirmó hace una semana su cadena perpetua por el asesinato de su tío Mario, un empresario del sector de la metalurgia. De acuerdo con la investigación, Bozzoli habría asesinado a su tío y hecho desaparecer el cuerpo arrojándolo a un horno o un tanque de metal fundido de la empresa familiar.
Tras la confirmación de la sentencia, Bozzoli resultó inmediatamente en paradero desconocido. Las autoridades emitieron entonces una orden de arresto y captura internacional, poniendo en marcha una búsqueda que finalmente lo ubicaría en un lugar sorprendentemente cercano.
Poco después de la emisión de la orden de arresto, Bozzoli fue visto a finales del mes de junio en un hotel de Marbella, en compañía de su pareja, Antonella Colossi, y su hijo. Ambos regresaron posteriormente a Italia, mientras que Bozzoli logró eludir nuevamente a las autoridades.
Sin embargo, los investigadores finalmente lograron localizarle en su propia casa, situada en la localidad de Soiano del Lago, en la provincia de Brescia. Fue encontrado escondido en una cajonera bajo el colchón de su cama, con 50.000 euros en efectivo en una bolsa.
La situación evidencia que Bozzoli no tenía ninguna intención de entregarse a la justicia para cumplir con la sentencia de cadena perpetua. Así lo señaló el fiscal de Brescia, Francesco Prete, quien indicó que este acto demuestra que el condenado estaba dispuesto a hacer todo lo posible para evitar su captura.
Con la captura de Bozzoli, se cierra un capítulo en la larga saga que ha envuelto su caso. Desde el asesinato de su tío y su posterior desaparición, pasando por su condena a cadena perpetua y su huida, hasta su captura final, el caso de Bozzoli ha capturado la atención tanto en Italia como en el extranjero.
Ahora, con Bozzoli tras las rejas, el proceso se moverá hacia la fase de cumplimiento de la pena. Sin embargo, la historia de Giacomo Bozzoli, el hombre que asesinó a su tío y se escondió bajo su cama en un intento desesperado de eludir a la justicia, seguramente seguirá siendo objeto de análisis y discusión en los años venideros.