La Fórmula 1 es un mundo donde la tecnología juega un papel crucial, y cada escudería busca siempre el mejor rendimiento posible de sus monoplazas. Sin embargo, no siempre los avances y actualizaciones resultan en mejoras. Es inusual que una escudería reconozca públicamente que las actualizaciones introducidas han resultado en un paso atrás, pero esto es precisamente lo que ha hecho Laurent Mekies, director de RB.
Mekies ha admitido abiertamente que las actualizaciones presentadas para el Gran Premio de España, que incluían un nuevo piso para el VCARB01, en realidad hicieron que el monoplaza fuera más lento. Esta desaceleración representó un retroceso notable con respecto al ritmo que había mostrado el vehículo desde Miami hasta Canadá.
El director de RB explicó que después de Barcelona se establecieron tres carreras para investigar qué estaba yendo mal. En Austria, decidieron competir con una mezcla de piezas nuevas y antiguas. En esa carrera, Ricciardo pudo puntuar debido a que ni Charles Leclerc ni Lando Norris terminaron entre los diez primeros. Sin embargo, una vez que salieron de Gran Bretaña, comprendieron que las actualizaciones eran un error.
Según Mekies, bajo ninguna circunstancia los monoplazas con las actualizaciones fueron más rápidos o mejoraron de alguna manera con respecto a la versión que debutó en Bahréin. Por lo tanto, no tenía sentido seguir intentando mejorar algo que estaba mal. Este error en la actualización afectará el rendimiento del equipo a mediano plazo, ya que se espera que sea después de las vacaciones de verano cuando se conciba una nueva agenda de desarrollo.
La nueva versión del VCARB 01 probablemente estará lista para los meses de octubre y noviembre. En esta ocasión, se planea una nueva propuesta de alerón delantero, similar a la que utilizan en McLaren y Mercedes. Para el área técnica de RB, lo más difícil de asimilar ha sido no entender lo que sucedió.
Mekies también considera que fue un error apresurarse con el desarrollo. La agresividad en la búsqueda de mejores resultados llevó a un retroceso en lugar de un avance. Señaló cómo en Haas F1 han logrado desarrollar muy bien su coche, hasta el punto de ser los más fuertes en la mitad de la tabla desde que presentaron novedades. Esta es una situación que, por el momento, no pueden replicar en Aston Martin.
El director de RB espera que, de aquí hasta el final de la temporada, puedan luchar por mantenerse en el sexto puesto entre los constructores, ya que no pueden aspirar a más en las actuales circunstancias. «Hay que entender lo que está mal», dijo Mekies. «Es un doble efecto negativo porque no se ha logrado la deseada ventaja, pero tampoco te puedes mover hacia la próxima actualización, hasta realmente comprender lo que está pasando. Hay que deshacer la mayor parte de las actualizaciones de Barcelona. Teníamos la esperanza de aumentar el rendimiento en comparación con Canadá y Mónaco, en lugar de eso volvimos a descender».
La Fórmula 1 es un deporte de precisión y tecnología, y a veces, el camino hacia el éxito no es lineal. Las actualizaciones pueden ser un arma de doble filo y, en este caso, han llevado a RB a tener que replantear su estrategia y volver a la versión básica de su monoplaza.