En medio de recientes controversias y disputas con el Gobierno y facciones oficialistas, el presidente del Partido Comunista, Lautaro Carmona, ha salido al paso para expresar su visión. Asegura que todo es parte de la normalidad del saber caminar con diferencias incluidas, cuando las hay. Insiste en que su colectividad tiene una convicción de pertenencia al Gobierno sin ninguna duda.
En relación a los incidentes en Villa Francia, Carmona sostuvo que alertar sobre un posible montaje fue una prevención y preocupación. Hoy se muestra conforme con la información proporcionada por la ministra Carolina Tohá. Asegura que nunca fue la intención del Partido Comunista cuestionar el dispositivo de una medida de seguridad vinculado al hallazgo de armas.
Por otro lado, Carmona confirmó que se reunirá con las ministras Camila Vallejo y Jeannette Jara. Sin embargo, enfatizó que estas son reuniones regulares y no emergencias extraordinarias ni convocadas por algún tema especial. En referencia a su intercambio con la presidenta del PS, Paulina Vodanovi, expresó su sorpresa de que se especulara sobre la convivencia interna del PC y asignara a las posiciones públicas desde el Partido Comunista como un tema interno.
En una entrevista con el periodista Hugo Guzmán, Carmona abordó varios temas de interés público. Sobre los eventos en Villa Francia, afirmó que el Partido Comunista está satisfecho con la información que la Ministra del Interior, Carolina Tohá, proporcionó respecto a los allanamientos y detenciones realizadas durante el fin de semana.
Carmona rechazó la idea de que el Partido Comunista pudiera haber manipulado el tema de los derechos humanos en un caso que se califica como delictivo. En este sentido, hizo hincapié en que la advertencia sobre un posible montaje fue simplemente una medida de precaución y preocupación.
En cuanto a las críticas recientes al Partido Comunista, que incluyen la controversia sobre el despido de Juan Andrés Lagos como asesor de la Subsecretaría de Interior y las críticas por el aumento de tarifas en las cuentas de luz, Carmona sostuvo que estos episodios representan un aspecto normal de las relaciones políticas. Aseguró que el Partido Comunista tiene una convicción indudable de pertenencia al Gobierno, pero también mantendrá su sentido crítico cuando sea necesario.
Sobre su relación con el Gobierno, Carmona dijo que todo es parte de la normalidad del saber caminar con diferencias incluidas. Aunque hubo desacuerdos en algunos aspectos, Carmona destacó que hay muchas áreas de coincidencia entre el Gobierno y el Partido Comunista. Estas incluyen la reforma previsional, la redistribución de la riqueza, la atención a los damnificados, la imposición del royalty minero, la implementación de las 40 horas laborales semanales, y la fijación del salario mínimo en 500 mil pesos.
En relación a su intercambio con la presidenta del Partido Socialista, Paulina Vodanovi, Carmona expresó su sorpresa sobre sus especulaciones respecto a la convivencia interna del Partido Comunista. Aseguró que las relaciones del PC con el PS no están dañadas desde su parte.
A pesar de las recientes controversias y tensiones, Carmona rechazó la idea de que existan diferencias y tensiones internas dentro del Partido Comunista. Aseguró que el Partido Comunista ha tenido históricamente una dinámica de debate, y que las diferencias de opinión enriquecen la exposición de planteamientos más que limitar o inhibir el diálogo.
Finalmente, Carmona descartó cualquier tensión entre las ministras comunistas y la dirección del PC. Explicó que las tareas políticas que les corresponden a quienes están en tareas de Gobierno tienen una representación más allá del propio partido, y es lógico que lo implementen de esa manera.