El ministro de la Secretaría General de la Presidencia de Chile, Álvaro Elizalde, expresó su visión sobre el rechazo en el Senado de una propuesta que buscaba desbloquear una reforma que extiende a dos días las elecciones municipales y regionales de octubre. La propuesta fue rechazada con votos oficialistas, pese a que buscaba reponer multas por no sufragar y reducir las contribuciones fiscales a las campañas electorales.
La moción no logró el apoyo necesario, obteniendo solo 25 de los 29 votos requeridos. Esto ha generado críticas desde la oposición y expertos electorales, quienes han señalado que esta decisión podría ser un intento del oficialismo de mantener un voto obligatorio sin multa, desincentivando así la participación ciudadana.
Se ha planteado que esta situación podría favorecer a la oposición, ya que la ausencia de multas podría desmotivar a la ciudadanía a participar en las elecciones. Sin embargo, desde el oficialismo, se ha argumentado que esta situación surge más bien del debate jurídico sobre la aplicación de multas a los extranjeros que no voten, una propuesta que fue visada en la comisión mixta, pero no respaldada en el Senado.
Cabe mencionar que, durante la discusión de este punto en la comisión mixta, el ministro Elizalde llegó a la sesión con algunos minutos de retraso, solicitando un cambio en la redacción para que la multa se aplique a «ciudadanos» y no a «electores», tal como se había decidido anteriormente.
En entrevista con Tele13 Radio, Elizalde describió el incidente como «lamentable», argumentando que si hubiera habido una voluntad de diálogo y un esfuerzo por llegar a un texto con consenso en la comisión mixta, la propuesta habría tenido apoyo en el Senado.
El ministro también explicó que la comisión mixta redujo la multa máxima de 3 UTM (Unidades Tributarias Mensuales), que equivalen a casi 200 mil pesos, a 2 UTM, manteniendo la multa mínima. Sin embargo, criticó a quienes votaron en contra de la sanción argumentando que la consideraban muy alta.
Elizalde enfatizó que su rol no es señalar a quienes votaron en contra, sino buscar acuerdos para que las leyes se aprueben. En este sentido, señaló que el Gobierno se reunió con diferentes bancadas y sectores para identificar los puntos de desacuerdo y propuso que la comisión mixta se encargara de resolver estos temas para lograr un texto con apoyo transversal. Lamentablemente, dijo, esto no fue posible.
En referencia a la acusación del senador Manuel José Ossandón (RN) de que durante cuatro meses el tema del voto de extranjeros «no estuvo en la discusión», Elizalde respondió que la ministra Tohá había planteado este tema al propio senador la semana anterior, y que era un punto que se había discutido con varios actores políticos.
En cuanto a su llegada tardía a la comisión mixta, Elizalde explicó que había avisado que llegaría un poco tarde debido a una entrevista previa. A pesar de esto, lamentó que no hubo voluntad para precisar la redacción del texto sobre la aplicación de multas.
Finalmente, Elizalde remarcó que su experiencia y su papel generador de acuerdos le permitieron prever que este tema podría generar problemas en la Cámara o en el Senado. La principal lección que sacó de lo ocurrido, dijo, es que debemos insistir en la voluntad de acuerdos y entendimientos, especialmente cuando se trata de reformas que implican leyes de quórum.
Respecto a la posibilidad de aplicar un voto diferenciado para extranjeros, Elizalde sostuvo que el principio conceptual detrás de cómo se ha aplicado históricamente el voto obligatorio en Chile es razonable y debería ser considerado. Afirmó que «los ciudadanos son los únicos que pueden salir elegidos».