La Fiscalía Nacional de Chile informó recientemente un incremento del 2,9% en los casos de secuestro durante el año 2023, acumulando un total de 850 causas. Este aumento, aunque pequeño, sigue siendo notable, especialmente teniendo en cuenta el salto del 68% que se observó entre 2021 y 2022, cuando los casos de secuestro aumentaron de 492 a 826.
Ana María Morales, gerenta de la División de Estudios, Evaluación, Control y Desarrollo de la Gestión, quien dirigió el estudio, mencionó la necesidad de mantener la recopilación y análisis de datos estadísticos para evaluar si la tendencia de secuestros se ha mantenido o modificado. En este sentido, Morales hizo hincapié en la persistencia de fenómenos delictivos violentos en Chile, muchos de los cuales tienen características propias de la criminalidad organizada.
El informe también desveló que el 18,7% de los casos de secuestro están vinculados a disputas familiares, en las que las víctimas son principalmente mujeres, retenidas contra su voluntad por sus parejas o ex parejas. Esta cifra representa una disminución en comparación con el 2022, cuando este tipo de secuestro representaba el 20,4% de los casos.
Además, el estudio subrayó que los secuestros que ocurren en el curso de otras actividades delictivas representan el 15,8% de los casos, y los secuestros con fines extorsivos constituyen otro 14%. Estas categorías de delitos están estrechamente relacionadas con el crimen organizado, como los secuestros con fines de explotación sexual, los secuestros por ajustes de cuentas, cobros, deudas o venganza, y los ocurridos entre grupos delictivos o dentro de ellos.
El informe también proporcionó una visión a largo plazo del fenómeno de los secuestros en Chile, señalando que, durante la última década (2013-2023), se han registrado un total de 5.876 delitos de secuestros. A nivel regional, la Fiscalía Regional Metropolitana Centro Norte registra el mayor número de ingresos de este tipo de casos, seguida por la Fiscalía Regional Metropolitana Sur y, en tercer lugar, Valparaíso.
Por tanto, las cuatro fiscalías de la Región Metropolitana acumulan el 48% del total de secuestros a nivel nacional en la última década. Este dato refleja la concentración de este tipo de delitos en las áreas urbanas más densamente pobladas del país.
Finalmente, el artículo concluye con un recordatorio y una llamada a la acción para las víctimas de violencia de género. Destaca la disponibilidad de ayuda gratuita y confidencial a través del número 1455 del Servicio Nacional de la Mujer y Equidad de Género (SernamEG). También se proporcionan otros números de contacto para aquellos que necesiten apoyo psicológico, social o legal, junto con una lista de los Centros de la Mujer de todo el país.
En términos generales, este informe de la Fiscalía Nacional ofrece una visión detallada de la problemática de los secuestros en Chile, revelando no solo su prevalencia y sus tendencias, sino también su compleja interrelación con otros fenómenos delictivos y sociales. Es un llamado a la acción para las autoridades y la sociedad en general para abordar este problema de forma efectiva y proporcionar el apoyo necesario a las víctimas.