Con el auge y popularización de las inversiones en criptomonedas o monedas digitales durante los últimos años, se ha observado una marcada disparidad en su adopción a nivel social. Este fenómeno ha sido particularmente notable en el mundo de internet, donde se ha denominado a un grupo de criptoinversores ruidosos y ostentosos como los «criptobros».
Un estudio reciente llevado a cabo por investigadores de las universidades de Toronto (Canadá) y Miami (EE.UU) se propuso analizar las características de los inversores en criptomonedas. La investigación se basó en una encuesta realizada a 2.001 adultos estadounidenses, de los cuales el 30% poseían monedas digitales. El resultado del estudio, publicado en la revista científica Plos One, reveló que los criptoinversores suelen creer en conspiraciones, apoyar extremismos políticos y presentar los conocidos como rasgos oscuros de la personalidad, que incluyen narcisismo, maquiavelismo, psicopatía y sadismo.
Los investigadores, aunque no tenían la intención original de corroborar el concepto estereotipado de los «criptobros», admiten que los resultados parecen apoyar esta idea. Según Shane Littrell, profesor de la Universidad de Toronto y coautor del estudio, su objetivo era entender qué distinguía a los poseedores de criptomonedas y si estos eran realmente individuos “psicológicamente no normativos” y “políticamente no convencionales”.
El estudio también identificó las variables que más se asocian con la inversión en criptomonedas. Entre ellas, destacan la creencia en teorías de conspiración, los rasgos oscuros de personalidad, el apoyo a grupos extremistas, un ingreso superior al promedio, sentimientos de victimismo y un uso más frecuente de plataformas alternativas de redes sociales y medios marginales. Otras características que predicen con fuerza quién tiene criptomonedas son ser hombre, tener una tendencia a discutir y mostrar una aversión al autoritarismo.
Según Littrell, los llamados rasgos de personalidad oscuros están asociados con actitudes no normativas. En investigaciones anteriores se ha descubierto que el grado en que una persona se involucra en comportamientos financieros arriesgados, como el juego y la inversión de riesgo en el mercado de valores, puede predecirse por los niveles de ciertos rasgos de personalidad oscuros, como el narcisismo o la psicopatía.
Otra característica notable de los inversores en criptomonedas es su tendencia a obtener información de fuentes alternativas de redes sociales como Telegram, Truth Social, Reddit, YouTube, Twitter, X, blogs y 8kun, menospreciando las fuentes de información tradicionales y consideradas más fiables. Littrell sostiene que este tipo de comportamiento puede estar ligado a una percepción distorsionada de los riesgos asociados con las criptomonedas.
Es importante aclarar que la investigación no afirma que todos los criptoinversores presenten estos rasgos, sino que en este grupo se encuentra un porcentaje notable de personas que se definen con este tipo de características. Los individuos analizados mostraron un interés variado por la derecha y la izquierda políticas, lo que complicó asignarles un bando ideológico concreto.
Cabe destacar que este estudio se ha centrado en entender cómo es más probable que sean los poseedores de criptomonedas en general, sin diferenciar entre quienes optan por bitcoin, la criptomoneda más tradicional, o nuevas modalidades más inestables.
Esta investigación no sólo ofrece una visión fascinante sobre la psicología y las características de los inversores en criptomonedas, sino que también proporciona una plataforma para futuros estudios y comprensiones más profundas sobre este fenómeno financiero en rápido crecimiento. Con la creciente popularidad de las criptomonedas, entender quiénes son los individuos que se sienten atraídos por esta forma de inversión y por qué, se vuelve cada vez más relevante.
