El Caribe se encuentra en estado de alerta debido al pronóstico de una «temporada extraordinaria» de huracanes para este verano. El cambio climático, las altas temperaturas del Océano Atlántico y el fenómeno de La Niña en el Océano Pacífico ya auguraban un verano tumultuoso desde principios de junio, cuando comienza la temporada de huracanes.
En las primeras horas de la mañana del domingo, el huracán Beryl fue categorizado como de grado 3 y los meteorólogos anticipan que se convertirá en una poderosa tormenta de categoría 4 a medida que avanza hacia el sudeste del Caribe. Las autoridades han emitido llamamientos urgentes a la población para que busque refugio.
Alertas de huracán se han activado para Barbados, Santa Lucía, Granada, y San Vicente y las Granadinas. El Centro Nacional de Huracanes en Miami ha advertido que la situación es muy grave para las islas de Barlovento norteñas y espera que Beryl traiga vientos que ponen en riesgo la vida y marejada ciclónica como un huracán extremadamente peligroso.
El domingo por la mañana, antes de que las autoridades actualizaran su categoría, el meteoro estaba a unos 750 kilómetros al este-sureste de Barbados y se desplazaba hacia el oeste a 33 km/h. La primera ministra de Barbados, Mia Mottley, en un discurso público el sábado por la noche enfatizó que «debemos permanecer atentos» y que «no queremos poner en peligro la vida de nadie».
Se espera que Beryl pase justo al sur de Barbados en la madrugada del lunes antes de ingresar al mar Caribe como un potente huracán en dirección a Jamaica y luego a México. El huracán Beryl es uno de los más fuertes registrados a estas alturas del año, cuando normalmente empiezan a formarse en agosto. El gobierno de Barbados ya ha emitido la advertencia del huracán, una iniciativa que han replicado los países vecinos.
Una vez que atraviese las Antillas Menores, el Centro Nacional de Huracanes estima que seguirá su camino cerca del sur de la isla de La Española, tanto la República Dominicana como Haití, y también Jamaica. Para el jueves, aunque con menos fuerza, se teme que pueda acercarse al sur de Cuba.
El experto estadounidense Tomer Burg ha advertido que la llegada temprana de Beryl no es la única preocupación. También parece inusualmente muy al sur. Según datos preliminares, es el cuarto o quinto huracán más al sur en los registros del Atlántico. Solo Iván en 2004, Martha en 1969 y otro en 1933 estuvieron más al sur.
La preocupación también ha llegado a Venezuela y Colombia debido a la incertidumbre de la trayectoria del huracán a partir del lunes. En Venezuela, se teme que los vientos y el fuerte oleaje castiguen las costas de Sucre. Si se acerca a la región suramericana, en Colombia las zonas bajo vigilancia serían Antioquia, La Guajira, el Chocó, Atlántico y Córdoba, además de las islas de San Andrés y Providencia.
En resumen, el Caribe está en alerta debido al pronóstico de una «temporada extraordinaria» de huracanes. Los expertos advierten que el huracán Beryl, que se espera que se convierta en una poderosa tormenta de categoría 4, podría traer vientos que pongan en riesgo la vida y una marejada ciclónica. Las autoridades han emitido alertas de huracán y han instado a la población a buscar refugio.