En una reciente entrevista con el diario mexicano La Jornada, el Presidente de Bolivia, Luis Arce, reveló que durante la reciente intentona de golpe de Estado en su país, temió por su vida. Aseguró que mientras se producía la asonada militar, recordó el caso del Presidente chileno Salvador Allende. Allende, al igual que Arce, también se enfrentó a un golpe de Estado.
Arce, quien ha sido el objetivo de un intento de golpe militar, afirmó que la resistencia popular y la solidaridad internacional fueron factores decisivos para frustrar el golpe. Recordó su participación en la resistencia en 1979 durante el golpe de Alberto Natusch y el golpe de Luis García Meza en 1980 cuando era un joven activista.
Destacó que el intento de golpe de Estado ha dejado «muchísimas enseñanzas» y que el principal de ellos es que «el enemigo principal nunca duerme». Durante el golpe, el Palacio de Gobierno fue irrumpido por militares. En su relato, habló de cómo las tres cabezas de las fuerzas armadas, aérea, naval y el ejército, participaron en el intento de golpe.
Arce explicó que se enteró del «movimiento no autorizado de tropas» en Challapata, un hecho que les llevó a entrar en alerta y a evaluar la situación. Según Arce, el general Juan José Zúñiga no respondió a sus comunicaciones durante el golpe. A pesar de esto, el mandatario boliviano señaló que algunas unidades militares acataron sus instrucciones y detuvieron su avance, lo que contribuyó al fracaso del golpe.
Además de la resistencia militar, Arce destacó la importancia del apoyo popular e internacional. Resaltó la importancia de las manifestaciones de solidaridad de otros presidentes y organismos internacionales, y afirmó que las acciones de «ver al pueblo en las calles» también fueron decisivas.
Arce también reflexionó sobre las razones detrás del intento de golpe. Según él, algunos países parecen no querer que Bolivia desarrolle sus propios recursos naturales. Reconoció que Bolivia es la primera reserva mundial de litio y que el país está en pleno proceso de industrialización. En este contexto, mencionó a las tres empresas con las que Bolivia está trabajando, dos de ellas de China y una de Rusia.
Arce también habló de las tensiones geopolíticas globales, afirmando que se están formando dos grandes bloques en el mundo. Según él, un nuevo bloque está desafiando a un viejo bloque, y esto está generando un «reflujo de fuerzas» a nivel internacional. Aseguró que cuando las fuerzas de izquierda están debilitadas, o cuando hay la oportunidad de posicionar a alguien, las fuerzas contrarias aprovechan la oportunidad para consolidar su hegemonía mundial.
En cuanto a las diferencias dentro del Movimiento al Socialismo (MAS) en Bolivia y con el exmandatario Evo Morales, Arce sostuvo que nunca ha atacado a Morales. Afirmó que ha sido él quien ha recibido ataques de Morales. Aseguró que su gobierno ha invitado a Morales en cuatro ocasiones a sumarse y hacer la unidad con ellos, pero estas invitaciones han sido ignoradas.
Finalmente, Arce expresó su preocupación por la situación y afirmó que la llamada a Morales fue un acto de compañerismo. Según él, sabían que los golpistas venían por él primero y luego irían por Morales.
Foto: La Jornada.