En un caso que ha conmocionado a la comunidad, una mujer y su conviviente han sido detenidos bajo la acusación de ser la encubridora y el autor material del homicidio frustrado de un niño de dos años. La víctima, quien es hijo de la mujer detenida, fue llevado al Hospital El Carmen en estado crítico con una fractura de cráneo. Según la madre, el menor de edad había resultado herido tras caer desde un vehículo. Sin embargo, el equipo médico del hospital determinó que las lesiones del niño no concordaban con la historia entregada por la madre.
El jefe subrogante de la Brigada de Homicidios (BH) Metropolitana, subprefecto Gabriel Alarcón, explicó que la incongruencia entre las lesiones del niño y la historia presentada por la madre, sumado a una serie de situaciones médicas, llevó a la situación al Ministerio Público para su investigación.
La madre, identificada como Yarixa Di Egidio Cornejo, y su conviviente, Jaime Samir Vega Henríquez, fueron detenidos por la Policía de Investigaciones (PDI). Vega Henríquez será imputado por el delito de homicidio frustrado en calidad de autor, mientras que Cornejo será acusada de encubridora.
La investigación del caso también reveló que este no era la primera vez que algo así sucedía en esa familia. Los detectives de la PDI ordenaron un examen médico al otro hijo de Cornejo, un niño de cuatro años. El reporte médico reveló que el niño presentaba diversas lesiones en diferentes evoluciones que dan cuenta de un maltrato que habría sufrido en el tiempo.
Por este motivo, a Cornejo también se la acusará de ser la autora de lesiones menos graves en contra de su hijo mayor de 4 años. De acuerdo a la investigación, se estableció que fue ella quien lo agredió como parte de un episodio de violencia intrafamiliar.
La formalización de la mujer y su conviviente se realizará durante este jueves. Este caso ha dejado un impacto en la comunidad, poniendo de manifiesto la importancia de la protección de los niños y la necesidad de intervención en casos de violencia intrafamiliar.
El trabajo de los profesionales del Hospital El Carmen, la Brigada de Homicidios, y la Policía de Investigaciones ha sido fundamental para llegar a la verdad en este caso y procurar justicia para los niños involucrados. Aún queda por ver cómo se desarrollará el proceso judicial, pero este caso ya ha marcado un hito en la lucha contra el maltrato infantil y la violencia intrafamiliar.
Este caso, trágico y angustiante, es un recordatorio claro de la necesidad de que todos – desde las familias hasta las instituciones públicas y privadas – deben trabajar juntos para proteger a los niños. Los niños son los miembros más vulnerables de nuestra sociedad, y todos tenemos una responsabilidad compartida en su bienestar y seguridad.
