A medida que la tecnología avanza a un ritmo exponencial, Intel, el gigante de los chips, está listo para lanzar su nueva línea de procesadores Intel Arrow Lake para escritorio. Según fuentes chinas, se espera que este lanzamiento tenga lugar en mediados de octubre de este año, una estrategia que sigue el patrón de lanzamientos de Intel, evidenciado por el lanzamiento de Raptor Lake Refresh en octubre del año pasado.
Este lanzamiento inicial estará limitado a los modelos de la serie K de Intel Arrow Lake. Estos modelos, que vienen con el multiplicador desbloqueado, permiten hacer overclock fácilmente y son ligeramente más potentes que los modelos no K.
Si estas afirmaciones son precisas, Intel lanzará primero Lunar Lake en septiembre, seguido por el procesador Intel Arrow Lake un mes después. Aunque ambas líneas de procesadores son muy diferentes, Lunar Lake está dirigido hacia ultra portátiles y equipos de pequeño tamaño, mientras que Arrow Lake se dirige a PCs de alto rendimiento.
La línea de Intel Arrow Lake será utilizada en PCs de alto rendimiento y también en portátiles donde la potencia sea más importante que la eficiencia. Las últimas informaciones indican que Arrow Lake utilizará el nodo Intel 20A en el bloque CPU, y que el bloque GPU estará fabricado bajo el nodo N4 de TSMC. Sin embargo, existe la posibilidad de que Intel termine utilizando el nodo N3B de TSMC en el bloque CPU.
En términos de la configuración de la CPU, se rumorea que Intel Arrow Lake mantendrá el máximo de 8 núcleos P y 16 núcleos E. Esto implica que el modelo tope de gama contará con un total de 24 núcleos. Intel mantendrá el HyperThreading en esta generación, una característica que no se incorporó en Lunar Lake por cuestiones de rendimiento-eficiencia. Sin embargo, se espera que esté limitado a los núcleos P, lo que resultaría en un total de 32 hilos en el modelo tope de gama.
Los núcleos P utilizarán la arquitectura Lion Cove y los núcleos E estarán basados en la arquitectura Skymont. Esta última arquitectura introduce cambios significativos a nivel de rendimiento comparado con la generación anterior, ya que mejora el IPC en un 68%. Por otro lado, Lion Cove representa una mejora de hasta un 14%. Estos aumentos en el IPC harán que los núcleos E sean mucho más versátiles y capaces de manejar cargas de trabajo más pesadas.
Intel Arrow Lake utilizará un nuevo socket, el LGA-1851, lo que significa que no será compatible con las placas base actuales. En octubre, solo las placas base Z890 de gama alta serán lanzadas, las cuales son las que permiten aprovechar las capacidades de overclock de los procesadores serie K de Intel. Las placas base B860 y H810 llegarán a principios de 2025 junto con los procesadores no K.
Es importante mencionar que toda esta información está basada en rumores y especulaciones. Intel aún no ha confirmado oficialmente ninguna de estas afirmaciones. Sin embargo, si estas predicciones resultan ser precisas, los entusiastas de la tecnología pueden esperar excitantes avances en el rendimiento y la eficiencia de los procesadores en el futuro cercano.