El mundo de los automóviles eléctricos ha experimentado un emocionante desarrollo en los últimos años, encabezado por grandes nombres como Tesla y Rimac. Sin embargo, un nuevo jugador ha entrado en la escena con una fuerza sorprendente: la firma japonesa Aspark. Ya conocidos por su impresionante Owl, que en 2018 estableció un récord de aceleración de 0 a 100 kilómetros por hora en solo 1,6 segundos, superando al Tesla Model S P100D, Aspark ha vuelto a hacer historia con su último vehículo, el Aspark SP600.
El Aspark SP600 ha logrado un logro impresionante, alcanzando una velocidad de 438,7 kilómetros por hora, superando así al Rimac Nevera que ostentaba el récord anterior. Este hito se logró en la pista de pruebas de Papenburg en Alemania, el mismo lugar donde Rimac consiguió su récord. El Aspark SP600, en colaboración con su socio italiano, Manifattura Automobili Torino (MAT), ya había superado la velocidad del Nevera con velocidades de 420,7 y 429,8 kilómetros por hora, pero decidió presionar aún más, demostrando la impresionante capacidad del vehículo.
Para alcanzar este récord, Aspark contó con la experiencia del piloto Marc Basseng, quien ostenta el récord de vuelta al Nürburgring en el Pagani Zonda R y es ganador de las 24 Horas de Nürburgring. Con Basseng al volante, el SP600 demostró ser el coche eléctrico más rápido existente hasta la fecha, alcanzando una asombrosa velocidad de 438,7 kilómetros por hora.
El Aspark SP600 es un portento de potencia y velocidad, equipado con cuatro motores que en conjunto producen 1.953 CV de potencia. Esta potencia se traduce en un impresionante par motor, con 4.600 Nm de par enviados a las ruedas traseras y 2.120 Nm a las delanteras. Además, el vehículo utiliza neumáticos Bridgestone Potenza de alto rendimiento y tiene una suspensión de doble horquilla y una altura controlada de manera activa. Este cóctel de características ha permitido al SP600 establecer este nuevo y emocionante récord.
El Aspark SP600 es el resultado de una década de trabajo y evolución en el Owl, el primer modelo de Aspark. El objetivo de Aspark ha sido siempre romper récords y avanzar en el desarrollo de vehículos eléctricos de alto rendimiento. El Aspark Owl se ha mostrado recientemente en Japón y en Estados Unidos, donde ha sido bien recibido en el Concurso de Elegancia Amelia 2024.
Uno de los puntos a tener en cuenta sobre el SP600 es que no es un coche matriculable, sino un prototipo. A diferencia del Rimac Nevera, que es un coche matriculable para circular en carretera, el SP600 es un prototipo de rendimiento puro. Para mejorar su coeficiente aerodinámico, el SP600 ha prescindido de elementos como los retrovisores, aunque este aspecto podría resolverse fácilmente con la utilización de cámaras en lugar de espejos.
En resumen, el Aspark SP600 es un hito en el mundo de los automóviles eléctricos, marcando un nuevo récord y demostrando la increíble capacidad de velocidad y potencia de estos vehículos. Aunque no es un vehículo matriculable, el SP600 es un testimonio del increíble progreso en la tecnología y el rendimiento de los coches eléctricos, y sin duda será un punto de referencia para los futuros desarrollos en este emocionante campo.