En un emocionante giro de los acontecimientos, un coche que en su momento fue uno de los pioneros del concepto SUV, que había desaparecido del mundo todoterreno, planea hacer su regreso triunfal al mercado. El regreso del Land Rover Freelander es oficial y promete causar sensación gracias a una alianza estratégica entre dos grandes fabricantes de automóviles.
El grupo inglés JLR (Jaguar Land Rover) y el grupo chino Chery han hecho público un nuevo acuerdo de colaboración para el desarrollo de un automóvil. Esta alianza, que ha estado en vigor desde 2012 para la fabricación en China de diferentes modelos de JLR, abre ahora un nuevo capítulo con el objetivo de resucitar la denominación de Freelander.
El Freelander, diseñado para ser un coche capaz de venderse en todo el mundo, hará uso de la última tecnología en sistemas de propulsión. Aunque la tecnología será de última generación, el precio seguirá siendo una consideración principal para asegurar que el vehículo sea accesible para todos los bolsillos.
La estrategia de JLR y Chery sigue los pasos que ya hemos visto en Range Rover, Defender o Discovery. JLR resucitará la denominación Freelander para convertirla en una nueva marca de coches más accesible e independiente. Utilizará los componentes y capacidad productiva de Chery, manteniendo en manos de JLR el diseño y el desarrollo de este nuevo modelo.
Freelander ahora se convertirá en una marca independiente y también se venderá en Europa, ampliando su alcance más allá del mercado chino. El objetivo inicial de esta joint venture entre ambos fabricantes es el lanzamiento de un primer modelo que será un SUV eléctrico. La producción de este vehículo se realizará en la factoría que Chery tiene en Changshu, China.
Freelander pretende comercializar sus coches en otros mercados como el europeo, aunque esto llegará en una segunda fase. Con Freelander convertida en una marca independiente y haciendo uso de la tecnología y capacidad productiva de Chery, esta firma se posicionará justo por debajo de toda la gama de JLR. Esto posiciona a estos coches como los más asequibles dentro de la oferta de JLR.
El primer Freelander será un SUV eléctrico, fabricado en China. Sin embargo, no se espera que este vehículo esté en las calles antes de 2026.
El Land Rover Freelander fue un modelo de corte SUV, aunque con buenas aptitudes todoterreno, que se fabricó entre 1997 y 2014. Durante su vida comercial, defendió el acceso de gama en Land Rover, siendo por lo tanto su coche más asequible. El final del Freelander se produjo con el lanzamiento del Land Rover Discovery Sport, un coche de vocación más familiar al disponer de hasta 7 plazas y un mejor desempeño como todoterreno.
Este regreso del Land Rover Freelander, combinando la tecnología avanzada con la accesibilidad en términos de precio, es un hito importante en la industria automotriz. Esta alianza estratégica entre JLR y Chery promete revolucionar el mercado del automóvil, y los entusiastas de los automóviles de todo el mundo esperan con ansias la llegada de este nuevo modelo.