El mundo de los vehículos eléctricos está en constante evolución, y no solo nos referimos a los automóviles. Las bicicletas eléctricas, también conocidas como ebikes, están ganando cada vez más popularidad por su practicidad y accesibilidad. Una de las marcas que lidera este mercado es Fiido, que puede que no sea tan conocida como otras marcas más grandes, pero ofrece algunas de las ebikes más modernas disponibles en el mercado hoy en día, diseñadas especialmente para aquellos que buscan una opción más ecológica y práctica para desplazarse por la ciudad.
La Fiido C21 es un excelente ejemplo de lo que ofrece esta marca. Esta bicicleta eléctrica cuesta solo 999 euros y se ha ganado la reputación de ser uno de los mejores vehículos para desplazarse por la ciudad, sin necesidad de licencia de conducir, seguro o estacionamiento.
A simple vista, una ebike puede parecer cara en comparación con una bicicleta convencional, pero si la comparamos con una motocicleta o un automóvil, se convierte en una opción extremadamente asequible. Además, tiene muchos menos gastos asociados: no necesita seguro, ni licencia de conducir, y no requiere un lugar de estacionamiento. En muchos casos, incluso puede llevarla a su lugar de trabajo y, por supuesto, no gasta gasolina.
Con las crecientes restricciones de circulación en las ciudades y la frecuencia de los atascos, las ebikes se convierten en una compra ideal. Además de la compra en sí, el único costo asociado es la carga de la batería, que puede hacerse en casa conectándola a la red eléctrica, con un gasto mínimo, similar al de cargar un teléfono móvil.
La Fiido C21 se destaca por su ligereza, pesando solo 18 kg, a diferencia de muchas ebikes que pueden llegar a pesar hasta 25 kg. Este peso ligero la hace fácil de manejar, incluso si necesita subirla por unas escaleras o arrastrarla cierta distancia.
Su diseño es moderno y se adapta perfectamente al entorno urbano. Su apariencia recuerda a las bicicletas de carretera antiguas, pero con un toque moderno y características de las ebikes gravel actuales. Aunque no tiene amortiguación, es perfecta para transferir todo el impulso a los pedales, aunque no está diseñada para enfrentar terrenos no asfaltados con obstáculos importantes. Sin embargo, sus ruedas son más gruesas que las de las bicicletas de carretera, lo que permite atravesar calles adoquinadas, carriles bici o incluso caminos sin problemas.
Una de las características más destacadas de la Fiido C21 es su batería integrada, que en condiciones ideales y en modo Eco puede proporcionar una autonomía de casi 100 km. En la práctica, la autonomía será menor, pero aún así, es poco probable que necesite recorrer más de 50 km en la ciudad para ir al trabajo y volver o hacer algunos recados.
El motor de la Fiido C21 es básico, diseñado para asistir al ciclista en desplazamientos por carretera sin obstáculos especiales. Puede manejar subidas inclinadas, pero no está diseñado para rutas complejas por montaña. A pesar de ser una ebike low-cost, cuenta con un sensor de par, no un sensor de cadencia, lo que asegura adaptar la asistencia eléctrica al esfuerzo que hacemos.
La Fiido C21 viene bien equipada, incluyendo iluminación integrada, guardabarros y una pata para dejarla de pie. También ofrece una serie de accesorios oficiales para ampliar sus posibilidades, como un portaequipajes, una pequeña maleta para instalar en este, o un extensor de batería. Sus frenos de disco hidráulicos aseguran una buena potencia de frenado, y hacen que además de ser ágil para moverse entre el tráfico también podamos disponer de una forma de frenado efectiva y rápida. Por 999 euros en su web oficial, es difícil encontrar una ebike mejor para la ciudad.