Después de un tumultuoso período de especulaciones, intentos fallidos de retención y negociaciones cargadas de controversia, el ansiado fichaje de Kylian Mbappé por el Real Madrid se ha confirmado oficialmente. Francia, su patria, se despide con pesar de uno de sus más brillantes talentos del fútbol.
La confirmación de este fichaje llega al amparo de la reciente victoria del Real Madrid en la decimoquinta Champions contra el Borussia, el equipo que eliminó al PSG en las semifinales. El PSG, el club donde Mbappé ha desarrollado su carrera durante los últimos siete años, se despide de su estrella, incapaz de retenerlo en sus filas.
La victoria en este tira y afloja es para el Real Madrid, que ha conseguido superar no solo al PSG, sino también al propio presidente de Francia, Emmanuel Macron. Macron esperaba que Florentino Pérez, presidente del Madrid, permitiera a Mbappé representar a la selección francesa en los Juegos Olímpicos que se celebrarán este verano en París. Aunque el joven prodigio jugará la Eurocopa, no ha sido incluido en la pre lista de convocados para los Juegos Olímpicos.
El diario francés Le Figaro ha resumido la situación con un titular que denota la decepción en el país galo: «Real Madrid y Pérez: 1, FFF (Federación Francesa de Fútbol) y Macron: 0». En medio de esta tensión, la ausencia de Mbappé en los Juegos Olímpicos se interpreta como un fracaso para la Federación, la ministra de Deportes y el presidente Macron.
El seleccionador francés, Thierry Henry, ha expresado su frustración ante la probable ausencia de Mbappé en los Juegos Olímpicos. Según Henry, las conversaciones con los representantes del Madrid han sido claras y directas. A pesar de un encuentro entre Macron y Florentino Pérez en el Elíseo, no parece probable que el club merengue vaya a cambiar de opinión.
El anuncio del fichaje, un rumor persistente durante los últimos meses, se ha confirmado esta mañana. Las cámaras han capturado un breve intercambio entre Mbappé y Macron, en el que este último pregunta: «¿Se anuncia hoy?» a lo que el futbolista responde «Esta tarde«.
Nacido y criado en Bondy, en las afueras de París, Mbappé no solo ha sido una superestrella para el PSG, sino también un embajador para Francia. Su partida se ha convertido en un asunto de Estado. Los intentos de Macron por retenerle funcionaron una vez, pero no esta vez.
Mbappé jugó su último partido con el PSG hace unas semanas, sin una ovación especial, y fue criticado por la prensa cuando el PSG cayó en las semifinales ante el Borussia. A pesar de su talento, Mbappé no ha logrado ganar una Champions con el equipo, ni ha conseguido el Balón de Oro, dos desafíos que afrontará en su nueva etapa en el Madrid.
Hace un año, Mbappé decidió no renovar con el PSG, y nunca ha ocultado su fascinación por el Real Madrid. En 2012, cuando tenía 14 años, visitó el centro de entrenamiento del equipo, invitado por Zinedine Zidane, otra gran figura del fútbol francés.
La prensa francesa se pregunta ahora cómo se integrará Mbappé en el vestuario del Madrid, descrito por Le Monde como «muy cosmopolita», y donde conviven grandes estrellas como los también franceses Eduardo Camavinga y Aurélien Tchouaméni.
