Como ya fue anunciado hace unas semanas, Hispano Suiza ha lanzado la nueva versión de su hipercoche eléctrico Carmen, conocido como el Carmen Sagrera. Esta versión presenta mejoras significativas en la batería y un diseño renovado que lo distingue del Boulogne y el Carmen ‘normal’. Este coche lleva el lenguaje de diseño y la filosofía de Hispano Suiza más allá de lo que se ha visto en las versiones anteriores. En este sentido, marca una forma única de celebrar los 120 años de existencia de la firma, además de presentar una versión mejorada del modelo que se reveló por primera vez hace cinco años.
El Carmen Sagrera fue presentado en un evento que contó con la participación de la bailarina Sol Picó y el ex piloto de Fórmula 1 y embajador de la marca, Luis Pérez Sala. Después de esta presentación, el hipercoche eléctrico español se mostrará en público en el Festival de Goodwood en julio. Este evento es un escaparate de lujo que se celebra en los terrenos del Duque de Richmond, en el sureste de Inglaterra, y donde se reúne el pasado, presente y futuro del mundo del motor.
La segunda generación de la batería de Hispano Suiza tiene una capacidad de 103 kWh brutos, en comparación con los 80 kWh del modelo anterior. Está compuesta por 15 módulos de 24 celdas, lo que suma un total de 360 celdas que pesan 612 kilogramos. Además, cuenta con un sistema de refrigeración líquida más ligero, simplificado y hecho de materiales sostenibles. El Carmen Sagrera tiene una autonomía de 480 kilómetros en el ciclo WLTP, 100 kilómetros más que con la batería anterior.
En términos de potencia, el Carmen Sagrera mantiene sus 1.114 CV. Sus dimensiones son de 4,733 metros de largo, 2,382 de ancho y 1,242 de alto. Este vehículo cuenta con cuatro motores eléctricos de 275 CV, cuya potencia conjunta es de 1.114 CV y 1.160 Nm de par motor. Los motores de imanes permanentes de flujo axial están conectados en serie. Este vehículo puede pasar de 0 a 100 en 2,6 segundos, moviendo sus 1.875 kilogramos de peso en vacío.
La potencia se dirige a las ruedas traseras y, gracias a un diferencial autoblocante virtual, se distribuye de manera eficiente a los neumáticos. Estos son de fábrica Michelin Pilot Sport 4 S. La suspensión es de tipo paralelogramo deformable con muelles ajustables en dureza y altura. Los trapecios son de un diseño especialmente ligero para contener el peso en vacío, mientras que los palieres están fabricados con un material de origen militar que es 8 veces más resistente que el acero convencional.
El Carmen Sagrera también presenta detalles especiales en los frenos. Utiliza discos carbocerámicos de 400 milímetros tanto en el eje delantero como en el trasero, diseñados para soportar un uso extensivo de frenadas en circuito. La potencia de frenada se ha incrementado en un 5% y cada una de las pinzas de freno de un solo bloque se ha aligerado en 500 gramos. La pedalera del Carmen Sagrera es más rígida que en los modelos anteriores, lo que mejora el agarre y ajusta la dirección para dar una sensación más cercana a la de un coche de carreras. Sin embargo, este vehículo no es precisamente apto para todos los bolsillos.