La escena política de Venezuela se ha intensificado recientemente, con la revolución bolivariana, liderada por Nicols Maduro, apuntando a sus opositores y periodistas en una caza que ha llevado a varias detenciones en el estado de Vargas, una región cercana a Caracas y la tierra natal del ex presidente encargado, Juan Guaid. Esta actividad se produce en medio de encuestas que muestran que Maduro se encuentra casi 40% por debajo del candidato opositor Edmundo González Urrutia.
Entre los detenidos se encuentran tres individuos que participaron en un evento en Maiquetía con González Urrutia. El primer detenido fue Jeancarlos Rivas, un estudiante de periodismo y encargado juvenil de Voluntad Popular, partido del ex prisionero político Leopoldo López. Luis López, otro periodista que acudió a cubrir la detención, fue el siguiente en ser arrestado. Finalmente, Juan Iriarte, coordinador de Vente Venezuela (VV), partido de Machado en el estado de Vargas, fue capturado.
Keyla López, la madre de Jeancarlos, asegura que su hijo es inocente y pide que tenga el derecho a defenderse. Las circunstancias alrededor de las detenciones son preocupantes, ya que los tres detenidos han estado desaparecidos desde su arresto y los cuerpos de seguridad se han desentendido de su responsabilidad. El embajador González Urrutia ha calificado estas detenciones como injustas y arbitrarias.
Esta serie de detenciones se suma a una larga lista de acciones represivas que se han dirigido a líderes cercanos a la líder opositora con el objetivo de imponer terror. Ya en enero, tres jefes de comando electoral, incluido Juan Freites, también de Vargas, fueron los primeros en ser encarcelados. En marzo, se sumaron dos dirigentes de la cúpula del partido, como Henry Alviarez, coordinador nacional, y la diputada Dignora Hernández, enlace de la operación política, a quienes se añadió el jefe regional de Barinas, cuna de la revolución.
En abril, Víctor Castillo, jefe del comando de VV en un pequeño pueblo de Portuguesa tras una concentración multitudinaria de Machado, fue arrestado junto a un emigrante que compartió sus desdichas en el mismo acto y una dirigente local del partido centrista Primero Justicia. La líder opositora, Maria Corina Machado, ha señalado que este tipo de represión no solo ocurre en Vargas, sino también en otros estados del país.
Además, desde finales de marzo, seis dirigentes clave en la actual campaña electoral se encuentran refugiados en la Embajada de Argentina en Caracas, bajo asedio revolucionario. Estos incluyen a Magalli Meda, jefa del Comando Con Venezuela; Claudia Macero, jefa de Comunicación; Humberto Villalobos, enlace electoral; Pedro Urruchurtu, responsable de relaciones internacionales; el diputado Omar González, secretario político, y el asesor Fernando Martínez Mottola.
Las mazmorras de Maduro ahora albergan a 278 presos políticos, incluyendo a siete con doble nacionalidad hispano-venezolana. Entre estos se encuentra Rocío San Miguel, una figura emblemática de la sociedad civil venezolana, a quien se acusa con pruebas falsas de participar en una supuesta conspiración militar.
Estos eventos reflejan la intensificación de la lucha política en Venezuela, pero también las tácticas de represión violenta y arbitraria empleadas por el régimen de Maduro contra sus opositores y la libertad de prensa.