Javier Velasco, el embajador de Chile en España, ha generado polémica con sus recientes declaraciones en un foro económico en Madrid, donde indicó que debido a las diferencias entre Chile e Israel por el conflicto en Gaza, se abre la oportunidad para negociar con nuevos proveedores de armamentos, invitando a la industria de Defensa española a participar. Sin embargo, sus palabras no fueron bien recibidas por el gobierno chileno, que consideró inapropiado que un diplomático comente sobre políticas de adquisición militar, un asunto que corresponde al Ministerio de Defensa.
El embajador Velasco, un amigo cercano del Presidente Gabriel Boric, ha sido el protagonista de varias controversias en el pasado. Sus recientes comentarios fueron calificados de “imprudentes” por el presidente de la comisión de Defensa del Senado, Pedro Araya, quién ha citado al Congreso al canciller Van Klaveren y a la ministra Maya Fernández para discutir el tema. Francisco Undurraga, presidente de la comisión de la Cámara, también expresó su desacuerdo con las declaraciones del embajador, señalando que un embajador no debería comentar sobre adquisiciones de Defensa.
El Ministerio de Defensa y la Cancillería optaron por no hacer comentarios sobre las declaraciones de Velasco. Sin embargo, fuentes del gobierno indicaron que se trató de una “interpretación propia” del embajador sobre las líneas de acción de Chile en esta materia. Afirmaron que, aunque Chile tiene una relación histórica con Israel, también ha diversificado sus proveedores. Además, recalcaron que España es un actor con el que se han estrechado lazos en materia de Defensa, pero no es el único.
Velasco hizo sus comentarios durante una charla titulada “la plataforma de Chile para España, en la zona Pacífico y el entorno de Defensa y Aeroespacial. Chile, como marca de confianza, en el entorno de la defensa”. En su disertación, se refirió a la decisión del gobierno chileno de retirar la invitación de Israel a Fidae 2024, debido al conflicto en Gaza, y sugirió que esto podría ser una oportunidad para otras empresas, invitando específicamente a la industria española de Defensa.
El embajador mencionó a ELS Industries, ITP e Indra, empresas españolas, como posibles socios en un futuro en el que el sector israelí podría compartir espacio con otros socios. Sus declaraciones fueron recogidas por el diario El País de España, que tituló su artículo «Chile intenta seducir al sector de defensa español ante el deterioro de sus relaciones con Israel».
Los comentarios de Velasco han sido criticados tanto por el gobierno como por expertos en defensa, señalando que no es tarea de un embajador comentar asuntos tan complejos como las políticas de adquisición de armamento. Un ex subsecretario de Defensa sugirió que el hecho se debe a la inexperiencia del embajador, ya que las compras militares son asuntos de Estado y no pueden ser definidas en cada embajada.
Además de las críticas a nivel gubernamental, los presidentes de las comisiones de Defensa tanto del Senado, Pedro Araya, como de la Cámara de Diputados, Francisco Undurraga, criticaron las declaraciones de Velasco. Araya señaló que las adquisiciones de material bélico se definen según las necesidades identificadas para responder a la política de Defensa del país, y calificó las declaraciones del embajador de “imprudentes”. Undurraga, por su parte, afirmó que un embajador no debería comentar sobre adquisiciones de Defensa y que las compras de material para la Defensa se licitan y existen procedimientos administrativos.
El general (r) Ricardo Martínez, ex comandante en Jefe del Ejército entre 2018 y 2022, también comentó sobre el caso, señalando que si el embajador de Chile en España hizo una intervención que involucra materias de defensa, es pertinente pensar que lo hizo con pleno conocimiento del gobierno. Sin embargo, indicó que un proveedor tan importante para Chile como Israel, que es una potencia militar y tecnológica mundial, no es reemplazable en el corto y mediano plazo.
Esta no es la primera vez que el embajador Velasco se encuentra en el centro de la polémica. En febrero, no asistió a la recepción anual que ofrece el Rey de España al cuerpo diplomático, una tradición centenaria, por encontrarse de vacaciones en Chile. También recibió críticas por sus comentarios en un foro en Madrid en septiembre de 2022, donde responsabilizó a la ex Concertación de las revueltas del 18-0 en Chile.