El informe anual publicado por el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur) denuncia una tendencia creciente en el número de desplazados forzosos a nivel mundial. Con una profunda preocupación, la agencia reveló que el número de personas desplazadas ha alcanzado los 120 millones en mayo de 2024, con un incremento constante en los últimos 12 años. Este incremento ha sido exacerbado por nuevos conflictos en lugares como Sudán y Gaza, y por conflictos enquistados como los de Siria y Myanmar.
Raouf Mazou, Alto Comisionado Adjunto para Operaciones de Acnur, atribuyó este aumento a la creciente cantidad de conflictos y a la ineficacia de los mecanismos actuales para resolverlos. Al hilo de esta afirmación, el Institute for Economics and Peace certificó que el mundo alcanzó el número más alto de conflictos activos desde la Segunda Guerra Mundial en 2023, con 56 conflictos y 92 países involucrados.
Si todas las personas desplazadas se unieran en un país, constituirían la duodécima nación más grande del mundo, con una población similar a la de Japón o dos veces la de Francia. El informe destaca que el 40% de los desplazados son menores de 18 años.
El documento de Acnur ofrece un desglose detallado de las cifras de los distintos grupos de población obligados a huir de sus hogares, principalmente a causa de la violencia, los conflictos y los desastres climáticos. El grupo más grande es el de los desplazados internos, con 68,3 millones de personas que se movieron dentro de sus propios países debido a guerras, principalmente en Sudán.
El informe también revela que el número de nuevas solicitudes individuales de asilo aumentó hasta los 3,6 millones en el último año. Sin embargo, hubo un descenso del 17% en el número total de personas que buscaban protección internacional en 2023, hasta los 5,6 millones. Esto se debió principalmente a la disminución del número de refugiados de Ucrania que solicitaron y obtuvieron protección temporal, sobre todo en países europeos.
La ONU hace un llamado a la responsabilidad y la solidaridad de todos los países para asumir el coste financiero de la protección de todas estas personas. El informe subraya que los países más desarrollados solo acogen al 25% de la población refugiada del mundo, mientras que el 75% restante permanece en su país de origen o en países vecinos con la esperanza de poder regresar lo antes posible.
La crisis de Sudán es un claro ejemplo de esta situación. Desde abril de 2023, se han registrado más de 7,1 millones de nuevos desplazamientos internos y más de 1,9 millones de desplazamientos hacia el exterior. A finales de 2023, un total de 10,8 millones de personas sudanesas habían sido desplazadas dentro y fuera del país.
Filippo Grandi, Alto Comisionado de Acnur, pide que las partes en conflicto respeten el derecho internacional y las leyes básicas de la guerra. “La realidad es que, si no hay una mayor cooperación ni esfuerzos conjuntos para abordar los conflictos, las violaciones de los derechos humanos o la crisis climática, las cifras de desplazamiento seguirán aumentando, lo que traerá consigo más sufrimiento y costosas respuestas humanitarias”, advirtió durante la rueda de prensa de presentación del informe.
Finalmente, el informe de Acnur aborda siete crisis que están detrás de estas cifras alarmantes: Palestina, Siria, Sudán, Myanmar, Afganistán, Ucrania y la República Democrática del Congo.