Durante su gira por Europa, el presidente de Chile, Gabriel Boric, concedió una entrevista a la Deutsche Welle (DW), en la que abordó diversos temas de política internacional, incluyendo la tensión entre su país y Venezuela, la posibilidad de retomar las relaciones diplomáticas con Bolivia, y las relaciones de Chile con Alemania.
La entrevista se realizó en el contexto de la gira europea de Boric, que comenzó en Berlín y que incluirá visitas a Suecia, Suiza y Francia. Durante su visita a Alemania, Boric se reunió con el canciller Olaf Scholz y el presidente Frank-Walter Steinmeier.
En cuanto a las relaciones entre Chile y Venezuela, Boric reconoció las tensiones actuales, pero descartó la posibilidad de romper relaciones con Caracas. En lugar de ello, argumentó que los resultados en política internacional se obtienen a través del diálogo y la construcción de puentes, no rompiéndolos. Sin embargo, criticó las declaraciones de las autoridades venezolanas sobre el secuestro y asesinato del exteniente Ronald Ojeda, describiéndolas como «irresponsables».
Boric también expresó su disposición para retomar las relaciones diplomáticas con Bolivia, un tema que ha sido históricamente delicado debido a las disputas territoriales entre ambos países. Boric subrayó que está abierto a conversaciones sobre este tema, siempre que se respete la integridad territorial de Chile.
En su entrevista, Boric subrayó la importancia de las relaciones diplomáticas con Alemania, describiendo a este país como uno de los socios tradicionales de Chile. Habló de la diversificación de las relaciones internacionales de Chile y destacó la cooperación entre ambos países en áreas como la economía, la ciencia, la tecnología y los derechos humanos.
Sobre el tema de los derechos humanos, Boric mencionó los esfuerzos de su gobierno para abordar el oscuro legado de la Colonia Dignidad, un enclave alemán en Chile donde se cometieron abusos sexuales y violaciones a los derechos humanos durante la dictadura chilena. El presidente chileno anunció la decisión de su gobierno de expropiar una parte de Colonia Dignidad para crear un centro de memoria y documentación, un proceso en el que el gobierno alemán está colaborando activamente.
Boric también habló de la importancia del litio para las relaciones entre Chile y Alemania. Durante su conversación con el canciller Scholz, Boric señaló que Alemania tiene un interés activo en potenciar sus inversiones en Chile, especialmente en la industria del litio.
En cuanto a la situación en Ucrania, Boric expresó su apoyo a Kiev y criticó la invasión de Rusia. Subrayó que las posturas en materia de política exterior deben ser guiadas por principios, no por intereses de corto plazo.
Sobre el conflicto palestino-israelí, Boric enfatizó la postura de su gobierno a favor de la causa palestina. Condenó tanto los ataques terroristas de Hamás como las acciones del Ejército de Israel en Gaza, que describió como «una brutalidad que tiene características de genocidio».
Finalmente, al reflexionar sobre su mandato, Boric destacó los esfuerzos de su gobierno para abordar los desafíos en seguridad, economía y pobreza en Chile. Expresó su deseo de dejar a Chile como un país mejor y con una democracia fortalecida al final de su mandato.
