La inteligencia artificial (IA) es una fiebre que ha sido alimentada por gigantes tecnológicos que han estado recopilando información personal de los usuarios durante la última década», afirma Meredith Whittaker, presidente de la aplicación de mensajería cifrada Signal y cofundadora del AI Now Institute, en la reciente Cumbre AI+ de Axios.
Por desgracia, este no es un titular nuevo y probablemente no será el último que leamos. Se hace eco de las críticas que recientemente se han vertido sobre Microsoft Recall, acusado de ser tremendamente invasivo con la privacidad de los usuarios. Aunque la firma de Redmond ha prometido suavizarlo, todavía queda por ver cómo se desarrollará.
Whittaker ha sido contundente en su crítica al «modelo de negocio de vigilancia» que favorecen las grandes plataformas tecnológicas. «Si cierras los ojos e imaginas cada correo electrónico que has enviado en una base de datos en la que todos pueden realizar búsquedas, sabrás por qué deberías preocuparte por proteger tus datos», advierte.
El debate sobre la IA sigue en pie. El alto costo de crear y ejecutar modelos de IA obliga a las empresas tecnológicas a buscar formas de monetizarlos, lo que a menudo conlleva la venta de nuestra información personal. «Cuesta cientos de millones de dólares entrenar estos modelos», comenta Whittaker, «por lo que hay una gran presión por parte de las empresas para obtener algún retorno de la inversión en esta tecnología». En el caso de Microsoft Recall, Whittaker lo describe como «un serio secuestro de la confianza» y «un peligroso honeypot para los hackers».
Whittaker, que pasó más de 13 años en Google, promociona su propio servicio, Signal, para aquellos usuarios que buscan privacidad y cifrado. Sin embargo, su perspectiva no es especialmente optimista. «Creo que deberíamos estar mortificados», dice, «especialmente aquellos de nosotros que comprendemos un poco lo que realmente hace esta tecnología y el historial de estas empresas y el entorno político en el que operan».
Signal es un servicio de mensajería Open Source y sin ánimo de lucro. Totalmente gratuito, ofrece chat de video, voz y texto, llamadas de voz y vídeo con cifrado de extremo a extremo, y transferencias seguras de archivos y fotos. Con funciones similares a Telegram y WhatsApp y una interfaz muy sencilla de usar, es una de las mejores alternativas en mensajería instantánea. El proyecto no depende de ninguna gran tecnológica y se mantiene con donaciones voluntarias. Trabaja bajo el protocolo Signal Messaging Protocol, reconocido como el protocolo de mensajería más seguro entre los disponibles. Su sistema de cifrado interno es utilizado por otros servicios como WhatsApp.
En cuanto a la inteligencia artificial, la industria mundial parece haberse embarcado en una auténtica locura donde, si no implementas IA, estás fuera de juego. Aunque existen proyectos de IA prometedores, como los de medicina en la búsqueda de curas para enfermedades, las posibilidades maliciosas de la IA resultan aterradoras. Lejos de pausar y reflexionar como algunos expertos vienen pidiendo, parece que la carrera por adoptar y desarrollar la IA sigue a toda marcha. Sólo el tiempo dirá a dónde nos lleva.
