El mercado del litio ha experimentado una caída significativa en los precios promedio de venta, lo que ha tenido un impacto directo en los beneficios recibidos por la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo) de Chile por el arrendamiento de sus derechos sobre el salar de Atacama. Los principales actores en este escenario son las compañías SQM y Albemarle, cuyos pagos a Corfo han experimentado una caída de hasta el 87% en comparación con el mismo período del año anterior.
Las cifras registradas por la agencia estatal indican que los pagos de ambas compañías durante los tres primeros meses del año alcanzaron un total de US$135 millones. Este monto representa una reducción de casi el 90% en comparación con los US$1.046 millones reportados en el mismo período de 2023. Este es el nivel más bajo de pagos trimestrales en más de dos años, desde el tercer trimestre de 2021, cuando las compañías pagaron conjuntamente US$42 millones a Corfo por el arrendamiento de los derechos sobre el mayor depósito de litio de salmuera del mundo.
La descomposición de estas cifras arroja más luz sobre la situación. Los pagos efectuados por SQM totalizaron US$94 millones, lo que representa una caída del 86% con respecto a los US$670 millones pagados a Corfo entre enero y marzo de 2023. Por su parte, su competidora, la compañía norteamericana Albemarle, pagó US$41 millones, un 89% menos que los US$376 millones girados a la agencia estatal en el mismo período el año anterior.
Las empresas que extraen litio del mayor depósito del mundo, incluyendo a SQM y Albemarle, están sujetas a un sistema de tasas de impuestos que varía en función de los precios de venta del mineral. Este sistema de impuestos comienza con una tasa del 6,8% cuando el precio por cada tonelada de carbonato de litio no supera los US$4.000 y aumenta progresivamente hasta el 40% cuando el precio del mineral supera los US$10.000. Así, los pagos de las compañías mineras reflejan la fluctuación significativa que los precios del litio han experimentado en los últimos años.
En el primer trimestre del año, el precio spot del litio en China promedió US$14.005 por tonelada, en comparación con los US$54.409 observados entre enero y marzo del año anterior y los US$58.142 de 2022. Este año marcó el inicio de un boom en el precio del litio, llevándolo a niveles nunca antes vistos, superando los US$82.000 por tonelada. La cima en los pagos al fisco se alcanzó precisamente en el segundo semestre de 2022, cuando ambas compañías sumaron un canon de arrendamiento de más de US$1.200 millones por trimestre.
A pesar de la caída en los precios, el volumen de ventas de litio informado por ambas compañías a Corfo en el marco de sus respectivos contratos de arrendamiento mostró un aumento del 31% en el primer trimestre. Entre SQM y Albemarle, vendieron un total de 64,8 mil toneladas de carbonato de litio equivalente (LCE, por sus siglas en inglés). De ellas, 53,67 mil toneladas corresponden a SQM, y 11,2 mil a Albemarle, lo que representa un aumento del 45% en el caso de la minera privada chilena, y una disminución del 10% en el caso de la firma norteamericana.
Estas cifras reflejan la estrategia de SQM de incrementar la producción a pesar de un contexto de precios más bajos, una decisión que ha sido cuestionada por analistas internacionales. Según ellos, las empresas deberían tener más disciplina en la gestión de sus inventarios para poder manejar mejor los precios. Sin embargo, SQM estima alcanzar una producción de 210 mil toneladas LCE en 2024, con ventas que podrían alcanzar las 200 mil toneladas.