Boric niega que el proyecto de aborto sea un tema de campaña electoral

Boric descarta que alusión a proyecto de aborto sea tema electoral

Gabriel Boric, el actual Presidente de Chile, fue confrontado recientemente acerca de su promesa de presentar un proyecto de ley de aborto, una declaración que hizo durante su discurso de la cuenta pública. Esta declaración provocó la marcha de algunos diputados de la oposición durante el discurso. Al ser cuestionado al respecto, Boric expresó su sorpresa ante la reacción, especialmente porque esta promesa fue un compromiso explícito de su campaña.

El Presidente expresó su desconcierto ante la sorpresa generada por una causa que, según él, ha sido una bandera del mundo progresista y del movimiento de las mujeres en Chile durante muchos años. Boric reafirmó que este compromiso fue parte de su campaña y también de la campaña de Yasna Provoste, de la Democracia Cristiana. De hecho, afirmó que esta causa ha sido defendida por los sectores progresistas desde el primer día de la democracia.

Boric también negó que esta iniciativa sea un intento de ganar votos durante las elecciones. Expresó su creencia de que nadie debería ser juzgado por tratar de cumplir con sus convicciones. Dijo que hay quienes han sugerido que esta podría ser una táctica electoral, pero en su opinión, los derechos de las mujeres no deberían ser medidos o manipulados por cálculos electorales de corto plazo. Añadió que los debates sobre los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres siempre han encontrado una gran resistencia por parte de los sectores más conservadores de la sociedad.

Boric observó que esta resistencia conservadora se demostró claramente durante su discurso de la cuenta pública, cuando los diputados de la oposición se levantaron y se marcharon. Posteriormente, algunos diputados del Partido Republicano anunciaron que romperían relaciones con el gobierno, un acto que Boric consideró como una tendencia común en ciertos sectores de la política chilena cuando se debaten temas de esta naturaleza.

En respuesta a la sugerencia de que las reacciones negativas podrían haber sido minimizadas si se hubiera hecho un llamado previo a los líderes de bancada o presidentes de los partidos, Boric afirmó que había conversado con los presidentes de los partidos que apoyan su gobierno. Aseguró que todos comprenden que, como Presidente de la República, no es sostenible que tenga que rendir cuentas a los partidos antes de cumplir con sus compromisos de campaña.

El presidente subrayó que todos los partidos de la coalición de gobierno están de acuerdo en que este es un asunto de política pública importante desde la perspectiva de los derechos regionales y del derecho de la mujer a decidir.

Con respecto al proyecto de ley de aborto en sí, Boric indicó que será liderado por el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, y que se revisará la experiencia comparada. Afirmó que la mayoría de los países democráticos tienen leyes de aborto legales, y que en la mayoría de los casos estas están sujetas a plazos. Esta es una parte del debate que, según Boric, la sociedad debe tener, y expresó su esperanza de que nadie se niegue a participar en un debate democrático.

Sobre este punto, Boric enfatizó la importancia de no negarse a debatir temas complejos. Criticó a aquellos sectores minoritarios de la política chilena que argumentan que si el gobierno habla de aborto, no habrá reforma de las pensiones. Señaló que esta postura es muy inconsistente, ya que sugiere que porque no están de acuerdo con una política pública específica relacionada con el derecho de las mujeres a decidir, no estarán disponibles para mejorar las pensiones de la mayoría de los chilenos que hoy en día no pueden vivir con lo que reciben.

Antonia Orellana, la Ministra de la Mujer y Equidad de Género, también discutió el debate sobre el proyecto de ley de aborto legal durante una nueva edición del espacio Gobierno Informa. Orellana apoyó la postura del Presidente Boric, argumentando que las mujeres de Chile merecen tener este debate de manera democrática. Recordó que cuando se derogó la ley de aborto en 1989, no hubo ninguna discusión, ya que se hizo a través de un decreto de la dictadura.

La Ministra Orellana sostuvo que es un error ubicar este proyecto de ley como una iniciativa de un sector específico del gobierno. En su lugar, afirmó que hay un consenso en el oficialismo sobre la importancia de avanzar y no retroceder en los derechos de las mujeres. También abordó la posible falta de votos en el Congreso para aprobar la ley, a causa del rechazo de la oposición y posibles deserciones en el oficialismo. Sin embargo, recordó que si se hubiera considerado solo el número de votos, las mujeres nunca habrían conseguido el derecho al voto. Por lo tanto, afirmó que el camino a seguir es continuar con el debate y la persistencia de las distintas generaciones de movimientos de mujeres.

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