Frutas de Chile, una organización representativa de la industria frutícola chilena, se ha pronunciado recientemente sobre la imposición de sobretasas por parte del gobierno chileno al acero chino. Su presidente, Iván Marambio, expresó su acuerdo con las críticas de Niu Qingbao, el embajador chino en Chile, sobre esta medida.
Marambio destacó que la sobretasa es una medida proteccionista que no sólo contradice las reglas del comercio internacional, sino que tampoco resuelve el verdadero problema del acero chileno. Según él, la falta de competitividad de la industria del acero chileno es más un reflejo de la falta de actualización tecnológica que un resultado de la competencia con China.
En lugar de imponer medidas proteccionistas, Marambio sugirió que se deberían considerar todos los hechos de ambas partes para un análisis técnico. Según él, la decisión de imponer sobretasas parece más una respuesta política que técnica.
En el caso de las diferencias comerciales, el presidente de Frutas de Chile destacó la necesidad de buscar una solución a través de mecanismos de resolución de conflictos que fomenten el diálogo y los acuerdos entre los dos países. Al referirse a la relación comercial de Chile con China, Marambio aludió a la historia de buenas relaciones y amistad que ha existido entre ambos.
En cuanto a la posibilidad de represalias de China debido al aumento de las sobretasas, Marambio no cree que esta sea una posibilidad, ya que China respeta las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
En una reciente exposición, el embajador Qingbao destacó que culpar a China por los problemas internos de las empresas chilenas no tiene fundamentos y no ayuda a resolver sus desafíos internos.
La Cancillería chilena también se pronunció sobre el tema, afirmando que las resoluciones de la Comisión Antidistorsiones se basan en argumentos técnicos y están en conformidad con las políticas de estado. Según el organismo, fue la Comisión la que determinó que las bolas de acero de origen chino eran objeto de dumping.
Aunque los comentarios de Marambio y Qingbao han causado cierto revuelo, es importante recordar que estos reflejan sólo una parte de la conversación más amplia sobre las relaciones comerciales entre Chile y China. La situación es, sin duda, compleja y multifacética, y seguirá evolucionando a medida que ambas partes navegan por el entramado del comercio internacional.