En la comunidad de Newham en el este de Londres, ‘Baby Harry’, ‘Baby Roman’ y ‘Baby Elsa’ fueron abandonados a las pocas horas de nacer en un lapso de siete años (2017, 2019 y 2024). Estos pequeños fueron encontrados en la vía pública y parques, envueltos en toallas, dentro de bolsas de plástico y con el cordón umbilical intacto. Los exámenes de ADN realizados han determinado que todos son hijos de los mismos padres.
La jueza de familia Carol Atkinson, en el interés del bienestar público, ha hecho un llamado para identificar a los progenitores de estos niños. Atkinson apela a la «conciencia pública» y cuestiona abiertamente las razones por las cuales un padre y una madre deciden abandonar a sus hijos en la sociedad actual.
Según el inspector James Humm, la policía de Scotland Yard ha enfrentado dificultades para identificar y localizar a los padres de estos niños. «Nuestra máxima prioridad es localizar a la madre», declaró Humm, destacando la importancia de proporcionarle el apoyo necesario.
Los dos primeros niños, ‘Baby Harry’ y ‘Baby Roman’, ya han sido adoptados, mientras que ‘Baby Elsa’, quien fue encontrada hace seis meses, permanece en un orfanato. El tribunal de familia que lleva el caso ha planeado una «reunión» entre los tres hermanos en el futuro, aunque la edad exacta para esto aún no ha sido determinada.
El caso más reciente fue el de ‘Baby Elsa’, encontrada en enero de 2024. Fue descubierta por una mujer que paseaba a su perro en el parque Greenway en Newham. Los llantos de la niña, envuelta en una toalla y dentro de una bolsa de plástico, alertaron a la paseante. Fue llevada con urgencia a un hospital con el cordón umbilical aún intacto.
La policía investigó la zona durante varios días en busca de testigos para intentar localizar a la madre. Aunque una persona afirmó haber visto a una mujer con un abrigo largo y oscuro, con una capucha y una bufanda de colores, llevando algo parecido a una mochila, no pudieron encontrar a alguien que correspondiera con esa descripción.
Cinco años antes, en enero, apareció abandonada ‘Baby Roman’, encontrada en una bolsa naranja de los supermercados Sainsbury y envuelta en una toalla. Fue descubierta por una abuela de origen lituano, Rima Zvaliauskiene, quien paseaba a su perro con su hijo Ovidijus.
El primer niño encontrado fue ‘Baby Harry’ en septiembre de 2017. Fue descubierto en un parque junto a Balaam Street, envuelto en una sábana a las 8:20 de la mañana. A pesar de los intentos de la policía para localizar a la madre, los esfuerzos resultaron infructuosos y el niño fue adoptado.
Según un estudio del University College de Londres (UCL), solo en uno de cada tres casos de niños abandonados se logra identificar a la madre. Un tercio de los bebés abandonados son encontrados muertos, especialmente cuando son dejados a la intemperie.
La profesora de la UCL, Lorraine Sherr, describe este caso como «extraordinario». En una ciudad como Londres, donde en tiempos de Dickens y Oliver Twist se registraban hasta mil bebés abandonados al año, las estimaciones más recientes de 2019 indican que el número anual de casos es de 16 en todo el Reino Unido.
Sherr sugiere que «problemas mentales» podrían ser una causa detrás de este triple abandono. Las dificultades económicas, el alcohol o las drogas, y problemas familiares y legales son otras posibles razones. Otro misterio es que los padres de ‘Baby Elsa’, ‘Baby Roman’ y ‘Baby Harry’ no estaban en el radar de los servicios sociales, y no parecen haber dejado rastros en el este de Londres.
