El acto de donar un órgano puede ser un proceso emocionalmente desafiante, pero también extremadamente gratificante. Las vidas que se pueden salvar y mejorar a través de la donación de órganos son innumerables, y los donantes y sus familias merecen ser reconocidos y honrados por su sacrificio. La ministra de Sanidad, Mónica García, ha destacado la importancia y ejemplaridad de estos donantes, así como de sus familias, quienes en momentos de profundo dolor y pérdida, eligen dar vida a otros.
Para fortalecer el apoyo a los donantes vivos, el Congreso de los Diputados aprobó la semana pasada una proposición de ley que establece un régimen de protección laboral específico para los donantes de órganos. Este es un paso importante en la mejora de la protección social de estas personas valientes que, a través de una cirugía mayor, optan por mejorar la vida de un familiar o incluso de un completo desconocido.
Beatriz Domínguez-Gil, directora de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), ha agradecido a todas las organizaciones que colaboran activamente en este proceso. La donación de órganos, según ella, es una forma de que nuestros valores como sociedad se manifiesten.
El primer miércoles de cada mes de junio, se celebra un homenaje a los donantes de órganos y a sus familias, recordando la importancia de la donación de órganos, tejidos y células. Este año, la ONT ha querido rendir homenaje a aquellos que han donado en vida un riñón o parte de su hígado, proporcionando una segunda oportunidad a un ser querido, y en algunos casos, a un desconocido.
Desde que se creó la ONT en 1989 hasta el 31 de diciembre de 2023, cerca de 6.500 personas han donado un riñón o parte de su hígado en vida en España. El primer trasplante renal de donante vivo se realizó en 1954 en el Hospital Brigham de Boston, Estados Unidos. En España, el primer procedimiento de este tipo tuvo lugar en el Hospital Clínic de Barcelona en 1965, seguido ese mismo año por la Fundación Jiménez Díaz de Madrid.
La actividad de trasplante renal de donante vivo fue limitada durante años en España, pero ha experimentado un aumento exponencial en este siglo. Si en el año 2000 hubo 19 personas que donaron un riñón en vida, la cifra se disparó hasta un máximo histórico de 435 procedimientos en 2023.
El crecimiento del trasplante renal de vivo en España responde a la necesidad de trasplante renal de la población, pero sobre todo a los mejores resultados que ofrece en comparación con el de donante fallecido. A esto se suma la seguridad del procedimiento para el donante, que siempre es sometido a una estricta evaluación médica y psicosocial, así como a un seguimiento estrecho de por vida.
En cuanto al trasplante hepático de donante vivo, el primer caso del mundo se llevó a cabo en un niño en la ciudad de Brisbane, Australia, en 1989. En España, el primer procedimiento se realizó en el Hospital Universitario La Paz de Madrid en 1993.
Según datos de la ONT, la media de edad del donante renal de vivo en 2023 fue de 54,4 años y la del receptor de 47,7 años. La relación más frecuente entre donante y receptor fue cónyuge/pareja sentimental (38%), seguida de hermano/a (23%), madre (17%), padre (7%), otra relación familiar (5%), hijo/a (3%) y amigo/a (3%). En el 4% restante, no existía ninguna relación entre donante y receptor, por haberse realizado el procedimiento dentro del Programa de Trasplante Renal Cruzado.
El Programa de Trasplante Renal Cruzado se basa en el intercambio de donantes de riñón de vivo entre dos o más parejas de donante-receptor incompatibles por grupo sanguíneo ABO o prueba cruzada positiva. Incorpora la figura del donante altruista para generar cadenas de trasplante que terminan con el de un paciente en lista de espera de donante fallecido.
El Programa español de Trasplante Renal Cruzado es uno de los más desarrollados en Europa, junto al de Holanda y el de Reino Unido. En 2018, la ONT internacionalizó el Programa de Trasplante Renal Cruzado a través de un acuerdo de colaboración con Italia y Portugal, permitiendo que las parejas donante-receptor que no encuentran un intercambio adecuado en sus programas nacionales, puedan encontrar una combinación en cruces realizados entre los tres países.
La ONT ha presentado a la Comisión Europea el proyecto EURO-KEP, con el objetivo de construir un programa de trasplante renal cruzado paneuropeo que permita cruces de parejas donante-receptor entre un mayor número de países, con un software y unas normas de funcionamiento comunes.
