El próximo martes 4 de junio, durante la sesión interhospitalaria titulada «Test de ejercicio mediante el uso de videojuegos: déficit de hormona del crecimiento», la Comisión de Residentes y Jóvenes Científicos de la Sociedad Española de Medicina de Laboratorio (SEQCML) pondrá de manifiesto una innovadora estrategia para el diagnóstico del déficit de hormona del crecimiento (GH). Esta sesión se enmarca dentro de su proyecto de formación virtual, la ACADEMIA SEQCML.
El déficit de GH es una condición en la que el cuerpo no produce suficiente hormona del crecimiento, una hormona crucial para el desarrollo normal en niños y adolescentes que se produce en la glándula pituitaria del cerebro. Los síntomas de este déficit suelen manifestarse como un crecimiento significativamente más lento que el promedio para su edad, también conocido como talla baja.
El papel del laboratorio clínico es fundamental en el diagnóstico y seguimiento del tratamiento del déficit de GH. Los especialistas trabajan en estrecha colaboración con otros profesionales sanitarios para garantizar el mejor resultado para el paciente, tal y como señala la Dra. Marta Fabre Estremera, miembro de la SEQCML y responsable de la sesión. En el laboratorio, se realizan las determinaciones asociadas a las pruebas diagnósticas, incluyendo pruebas de estimulación de la GH y análisis de sangre en situación basal.
Asimismo, se realiza una analítica completa inicial para descartar otras posibles causas de talla baja como la celiaquía, el hipotiroidismo o el síndrome de Cushing. Una vez diagnosticado el déficit, la labor continúa con la monitorización del tratamiento, estudiando si los niveles en sangre de las diferentes hormonas se encuentran en los rangos deseados, según la dosis pautada por los endocrinos pediátricos.
Existen diferentes pruebas funcionales de estimulación de la hormona del crecimiento que pueden ser fisiológicas, como el sueño o el ejercicio, o farmacológicas, como la clonidina o el glucagón. Todas estas pruebas tienen en común la administración de un estímulo y la consiguiente determinación de GH en sangre para evaluar la respuesta del organismo.
El test de ejercicio mediante el uso de videojuegos es una de estas pruebas de estimulación de la GH. Según la médico residente de segundo año en Bioquímica Clínica del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza, Eva Martínez Marzo, el test consiste en la «realización de pruebas físicas mediante un videojuego, durante 20 minutos, monitorizadas durante toda la prueba a través de la frecuencia cardiaca».
Antes de empezar con la prueba, se realiza una determinación de sangre de la hormona de crecimiento basal. A continuación, se realiza el test de ejercicio con el uso de videojuegos y al finalizar, se vuelve a extraer sangre para cuantificar la GH. «Se considera una respuesta adecuada si se produce una estimulación de la secreción de la hormona», precisa Martínez Marzo.
El ejercicio físico en la infancia estimula la producción de GH a través de la activación directa de la glándula pituitaria y el aumento de factores metabólicos, como la adrenalina. De hecho, en las pruebas de estimulación de GH mediante videojuegos, «nos aprovechamos de esa estimulación natural, para que los niños realicen una prueba divertida y no invasiva, que permita estudiar la respuesta orgánica a este estimulo», afirma la Dra. Fabre Estremera.
Los principales beneficios de esta prueba, en comparación con otras pruebas funcionales de estimulación, es que se trata de un método no invasivo, rápido y carente de riesgos para los niños. «Otras pruebas de estimulación se realizan mediante la toma de fármacos, pudiendo tener efectos secundarios como hipotensión o hipoglucemia. Además, es de fácil ejecución y los niños se encuentran entretenidos, motivados y sin estrés durante la prueba», señala Martínez Marzo.
La implementación de los videojuegos en los test de ejercicio ha permitido estandarizar los protocolos. Tradicionalmente, el test de ejercicio consistía en la realización de diversas pruebas físicas durante 20 minutos, pero tenían la limitación de la falta de estandarización de los protocolos y una falta de respuesta adecuada en el paciente, generando falsas respuestas.
Con la introducción de los videojuegos, es posible monitorizar la frecuencia cardiaca durante toda la prueba, de tal manera que se considera válida si se consigue alcanzar el 75% de la frecuencia cardiaca máxima, lo que indica un ejercicio de alta intensidad. «El protocolo de ejercicio mediante el uso de videojuegos tiene una intensidad y duración adecuada para producir un estímulo suficiente de GH», remarca Eva Martínez Marzo.
Finalmente, ambas especialistas defienden que el test de ejercicio mediante el uso de videojuegos es una técnica válida como herramienta de cribado para el estudio del déficit de hormona del crecimiento, e insisten en la importancia de un «abordaje multidisciplinar para el estudio del eje del crecimiento entre los diferentes servicios implicados».