Meta, la empresa propietaria de Facebook e Instagram, ha anunciado que utilizará los contenidos publicados por los usuarios en estas redes sociales para entrenar sus modelos de inteligencia artificial (IA). Este movimiento no debería sorprender a nadie, teniendo en cuenta el historial de la compañía en cuanto a la protección de datos y la privacidad. En el pasado, Meta ha enfrentado multas por incumplir la legislación sobre privacidad y ha estado involucrada en escándalos como el de Cambridge Analytica.
Este nuevo desarrollo pone de relieve una vez más las políticas de privacidad cuestionables de Meta. La legislación de la Unión Europea sobre la privacidad obliga a la compañía a proporcionar un mecanismo que permita a los usuarios evitar que sus datos sean utilizados para fines como el entrenamiento de modelos de inteligencia artificial. Sin embargo, parece que la opción para optar por no participar en la recopilación de datos está implementada de manera poco clara en Facebook e Instagram y no es automática.
La intención de Meta de utilizar las publicaciones de los usuarios en sus redes sociales para entrenar sus modelos de inteligencia artificial ha salido a la luz gracias a que la propia compañía está notificando a los usuarios que se encuentran en la Unión Europea. Aunque esto podría parecer un ejercicio de transparencia, parece más bien un movimiento forzado por la legislación de la Unión Europea, que tiende a ser bastante estricta en materia de privacidad y la defensa de los derechos de los consumidores.
Cabe recordar que el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) de la Unión Europea proporciona cuatro protecciones clave contra el uso indebido de los datos personales. Estas protecciones incluyen la necesidad de tener un motivo específico y legal para procesar los datos, la obligación de cifrar los datos personales, el derecho de los usuarios a copiar sus datos y la posibilidad de que los usuarios soliciten en cualquier momento que sus datos sean borrados.
El uso de las publicaciones de los usuarios en las redes sociales para entrenar sus modelos de inteligencia artificial es un nuevo desafío para Meta. Sin embargo, este caso parece menos escandaloso que otros que hemos conocido. De hecho, resulta aún más preocupante que la compañía haya admitido que utiliza material pirateado para entrenar sus modelos de lenguaje grande. Esto es especialmente irritante si consideramos que muchos pequeños creadores de YouTube ven sus trabajos desmonetizados o shadowbaneados por pequeños deslices en esta materia, mientras que Meta parece inmune a las infracciones de derechos de autor.
La conformidad de Meta con la legislación de la Unión Europea es algo que deben determinar los tribunales y las propias instituciones comunitarias, que en más de una ocasión han demostrado que no dudan en hacer valer su autoridad. La compañía ha informado que la recopilación de datos comenzará a partir del 26 de junio de 2024. En el futuro, será interesante observar cómo Meta navega en estas aguas turbulentas en términos de privacidad y protección de datos, y cuáles serán las implicaciones para los usuarios de sus redes sociales.