En medio de una operación de fiscalización en Puente Alto, un grupo de cinco carabineros sufrieron lesiones de diversa consideración al ser emboscados y atacados por una turba de antisociales. Los sucesos ocurrieron mientras los oficiales estaban llevando a cabo un control a una persona que se encontraba consumiendo droga en la vía pública.
El incidente se desencadenó cuando los carabineros procedieron a realizar la fiscalización de un segundo individuo, el cual tenía una orden de captura vigente. Fue en ese momento cuando un grupo de antisociales, que se encontraban en la población Padre Hurtado, rodearon a los carabineros y comenzaron a atacarlos.
Los agresores, estimados en un número de entre veinte a treinta individuos, lanzaron piedras a los oficiales y los golpearon con pies y puños. Como resultado, dos carabineros fueron internados en el hospital institucional en estado grave, aunque sin riesgo vital. Los demás oficiales también resultaron lesionados, aunque con heridas de menor gravedad.
El coronel Robinson Villarroel, de la Prefectura Cordillera, fue quien detalló los eventos a CHV Noticias. Según sus declaraciones, los carabineros estaban realizando una fiscalización a una persona que se encontraba consumiendo droga en la vía pública. Cuando procedieron a la fiscalización del segundo individuo, que tenía una orden vigente por la Ley 20.000 de drogas, fue cuando el grupo de delincuentes encerró a los carabineros.
El coronel Villarroel declaró que los atacantes golpearon a los carabineros con pies y puños, además de lanzarles piedras. Los golpes fueron contundentes y resultaron en cinco carabineros lesionados. Dos de ellos se encuentran en estado grave, aunque sin riesgo vital, en el hospital institucional.
Además de los ataques físicos a los carabineros, los vehículos en los que se movilizaban también sufrieron daños. Un total de siete radiopatrullas quedaron destrozadas en el altercado.
Este incidente pone en relieve la creciente violencia y la falta de respeto por la autoridad en algunas áreas. Los carabineros estaban realizando su deber, llevando a cabo fiscalizaciones en la vía pública para garantizar la seguridad y el orden, cuando fueron atacados por una turba.
Es importante destacar que los carabineros estaban cumpliendo con sus obligaciones y actuando en concordancia con la Ley 20.000 de drogas, que regula el tráfico ilícito de estupefacientes y sustancias psicotrópicas. Los individuos a los que se les estaba realizando la fiscalización estaban, de hecho, violando esta ley.
El incidente en Puente Alto es un recordatorio de los riesgos que enfrentan los carabineros en su trabajo diario. A pesar de los desafíos, continúan cumpliendo con su deber de proteger y servir a la ciudadanía, incluso cuando se enfrentan a situaciones de violencia y peligro.