El pasado fin de semana, el mundo del automovilismo se vio envuelto en una carrera peculiar, las 24 Horas de Nürburgring, una de las pruebas más prestigiosas del mundo de las carreras de autos. Sin embargo, este año, la competencia tuvo un giro inesperado debido a la poca visibilidad en la pista, resultando en un desafío de seguridad para los participantes y los espectadores.
Después de solo 50 vueltas, la dirección de carrera tuvo que declarar bandera roja, suspendiendo la carrera debido a la niebla que comprometió la visibilidad en la pista. A pesar de esperar durante un lapso de 14 horas para ver si las condiciones mejoraban, la decisión final fue que la prueba debía ser suspendida. Esta decisión, aunque controvertida, fue necesaria para garantizar la seguridad de los pilotos y las más de 240.000 personas que se reunieron en el circuito para presenciar la carrera.
A pesar de las circunstancias difíciles, la victoria fue otorgada al equipo Audi R8 LMS GT3 de Scherer Sport PHX, compuesto por los pilotos Ricardo Feller, Dennis Marschall, Christopher Mies y Frank Stippler. Esta victoria marcó un hito en el historial de Audi, que a pesar de no contar con un programa de coches clientes actualmente, logró su séptima victoria en las 24 Horas de Nürburgring. Además, los pilotos Frank Stippler y Christopher Mies acumulan ahora tres victorias en esta prestigiosa competencia.
El segundo lugar fue para el equipo del Porsche 911 GT3.R de Manthey EMA, con la alineación de Kévin Estre, Ayhancan Güven, Thomas Preining y Laurens Vanthoor. Mientras que el tercer puesto fue para el BMW M4 GT3 del BMW Team RMG, con los pilotos Charles Weerts, Dan Harper y Max Hesse.
Es importante hacer una aclaración sobre la clasificación, ya que el Porsche de Manthey estaba en tercer lugar cuando se ondeó la bandera roja, pero fue ascendido al segundo lugar debido a que el BMW de RMG realizó una detención en boxes. Según el reglamento de esta carrera, los tiempos mínimos acumulados en las paradas en boxes se incluyen en la tabla general, incluso con la suspensión por bandera roja.
El Audi R8 LMS GT3 Evo II número 16 estaba liderando la carrera hasta el sábado a las 11:23 de la noche, justo cuando se detuvo el evento. La carrera se reanudó el domingo a la 1:30 p.m, pero después de cinco vueltas al circuito detrás del coche de seguridad, la dirección de carrera decidió dar por finalizada la carrera debido a la poca visibilidad que todavía persistía.
Este año, las 24 Horas de Nürburgring presentaron condiciones difíciles desde el principio. A solo cuatro horas de iniciada la carrera, comenzó a llover y el entonces líder Sheldon van der Linde sufrió un accidente que involucró a varios coches. Con 127 coches en la pista, la seguridad se convirtió en una preocupación primordial, culminando con la suspensión de la carrera.
Esta edición de las 24 Horas de Nürburgring quedará para la posteridad, no solo por la victoria de Audi, sino también por ser la carrera con la menor distancia registrada desde las 59 vueltas de la edición de 2021. Aunque la decisión de suspender la carrera fue difícil, la seguridad de los pilotos y los espectadores siempre debe ser la prioridad.