Un joven de 18 años de origen checheno ha sido recientemente acusado en Francia por planear un presunto atentado «de inspiración islamista» contra los próximos Juegos Olímpicos de París. Según fuentes oficiales, el acusado tenía intenciones de atacar a los espectadores y las fuerzas del orden en los alrededores del estadio de fútbol de la ciudad de Saint-Étienne, donde se celebrarán varios partidos de fútbol. El Ministerio del Interior de Francia ha revelado que el acusado aspiraba a morir como mártir tras llevar a cabo su ataque.
Este presunto atentado es el primero que se ha frustrado contra los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, y es el número 50 que se ha evitado desde 2017, cuando el actual presidente francés, Emmanuel Macron, asumió el poder. La amenaza terrorista continúa siendo un motivo de gran preocupación para las autoridades francesas en la preparación de los Juegos Olímpicos. Se espera que para el día de la ceremonia inaugural el 26 de julio en el Sena, se desplieguen alrededor de 45.000 policías y gendarmes.
El acusado, quien llegó a Francia el año pasado con su familia, negó durante los interrogatorios haber realizado reconocimientos en las cercanías del estadio Geoffroy-Guichard, tal como se le acusa. Este joven pretendía, según las autoridades, atacar directamente a los espectadores en las inmediaciones del estadio después de darse cuenta de las dificultades para atentar directamente en el estadio.
El Ministerio del Interior, dirigido por Gérald Darmanin, ha señalado que los servicios de inteligencia habían recibido informaciones que indicaban que había personas identificando posibles lugares para un atentado durante los partidos de fútbol en los Juegos. La Fiscalía antiterrorista ha anunciado que los agentes de la Dirección General de Seguridad Interior detuvieron al sospechoso el 22 de mayo en Saint-Étienne, una de las subsedes olímpicas, al suroeste de Lyon. El 26 de mayo fue imputado por «asociación terrorista de malhechores con vistas a preparar crímenes que atentan contra las personas».
El joven acusado no es el primer ciudadano con orígenes en el Cáucaso Norte implicado en un atentado terrorista en Francia. En octubre de 2018, un joven checheno radicalizado decapitó al profesor Samuel Paty en un instituto cerca de París. Además, el responsable de un ataque con cuchillo en el barrio de la Ópera de París unos meses antes también era de origen checheno. El asesino del profesor Dominique Bernard en octubre pasado en la ciudad norteña de Arras era originario de Ingushetia, en el Cáucaso.
En un artículo publicado tras el atentado de Arras, Le Monde hablaba de «una nueva generación [de caucásicos afincados en Francia] más atraída [que la de sus mayores] por la yihad global». Cita un informe de la DGSI de 2020 que apunta: «Pese a su peso demográfico muy débil en Francia, la comunidad del norte del Cáucaso está sobrerrepresentada en el contingente yihadista francés que ha llegado hasta la tierra de yihad.» Añadió que «individuos de la nueva generación chechena que han seguido en el territorio nacional están con frecuencia representados en los proyectos de acción violenta.»
En este contexto de creciente tensión, las autoridades francesas se mantienen alerta y trabajan incansablemente para garantizar la seguridad de los Juegos Olímpicos de París. Los esfuerzos por prevenir posibles ataques y mantener la seguridad de los participantes y espectadores de los juegos continuarán siendo una prioridad en los próximos meses.