El viernes pasado, la Sala del Senado chilena aprobó la propuesta de un proyecto que busca permitir que las elecciones municipales y regionales de este año se lleven a cabo en dos días en lugar de uno. La iniciativa fue respaldada con 29 votos a favor, 11 en contra y una abstención, un resultado que abre un plazo hasta el lunes 3 de junio para presentar indicaciones.
Los defensores del proyecto argumentan que, en esta ocasión, la votación será obligatoria, lo que aumenta significativamente la cantidad de votantes. De hecho, se estima que el número de personas que votarán ascenderá a 12 millones. Además, explican que, dado que los votantes deben escoger cuatro cargos de elección popular, se necesitará un promedio de 4 minutos por sufragante. Este tiempo, multiplicado por el número de votantes, hace que sea prácticamente imposible realizar las elecciones en un solo día.
Además, señalan que fue el propio Servicio Electoral (Servel) el que sugirió la necesidad de implementar la elección en dos jornadas. Según el Servel, esta medida permitiría acomodar el aumento de votantes y garantizar que el proceso electoral se desarrolle de manera ordenada y eficiente.
Sin embargo, no todos están de acuerdo con esta propuesta. Algunos sostienen que las elecciones deberían realizarse en un solo día, como es el caso en la mayoría de los países. Argumentan que la realización de las elecciones en dos días podría permitir que algunos sectores influyan en los resultados a través de publicaciones en redes sociales al finalizar el primer día de votación.
Para evitar esta posible influencia, algunos sugieren que se deberían ampliar las mesas y locales de votación. Esto permitiría acomodar el aumento de votantes y concentrar los comicios en un solo día.
El proyecto propone que las elecciones municipales y regionales se celebren el sábado 26 y el domingo 27 de octubre. Además, establece que las urnas permanecerán selladas entre la noche del sábado y la mañana del domingo, custodiadas en salas específicas de los locales de votación y bajo la protección de las Fuerzas Armadas y del Orden.
Según el proyecto, solo el día domingo, que es el día en que se celebran las elecciones, tendrá el carácter de feriado irrenunciable.
Además, el proyecto busca eliminar la prohibición actual que impide que los establecimientos comerciales vendan bebidas alcohólicas entre las 5 de la mañana y dos horas después del cierre de la votación.
Por último, el proyecto incluye una serie de normas para mejorar el sistema electoral. Estas normas incluyen sanciones para quienes no voten, la obligación de los administradores electorales de informar en detalle los gastos, la regulación del uso de redes sociales y plataformas digitales para la propaganda electoral, y cambios en el proceso de designación de vocales, entre otros aspectos.
En definitiva, el proyecto busca expandir el proceso electoral a dos días para acomodar el aumento de votantes. Sin embargo, esta propuesta ha sido objeto de debate y aún debe pasar por varios procesos antes de ser aprobada o rechazada.