En una noche llena de suspense y acción, los Minnesota Timberwolves obligaron a aplazar la celebración de los Dallas Mavericks, que estaban a un paso de avanzar a las Finales de la NBA. En un emocionante encuentro, los Timberwolves vencieron a los Mavericks 102-105 en su propio feudo, forzando un quinto partido en la serie, que se disputará este jueves en Minneapolis.
Los Mavericks, que estaban preparados para festejar su regreso a las Finales de la NBA por primera vez desde 2011, fueron sorprendidos por los Wolves en el American Airlines Center de Dallas. El héroe de la noche fue el dominicano Karl Anthony Towns, quien con tres triples en el último cuarto, mantuvo a los Wolves en la lucha.
A pesar de estar abajo 0-3 en la serie, los Timberwolves no se rindieron. Ningún equipo en los 155 antecedentes en los que estuvo en esta situación ha logrado remontar. Sin embargo, los Wolves siguen luchando, a diferencia de los Indiana Pacers que se rindieron ante los Boston Celtics, quienes ya están esperando a su rival en las finales.
Los Mavericks, por otro lado, todavía tendrán que ganarse su pase. No pudieron aprovechar su ‘bola de partido’ a pesar de un triple-doble de 28 puntos, quince rebotes y diez asistencias de su estrella eslovena, Luka Doncic. Doncic, quien estaba en duda para el partido debido a una lesión, ha acumulado seis triples-dobles en esta postemporada.
En los últimos segundos del juego, con los Mavericks cinco puntos abajo, Doncic estuvo a punto de cambiar el rumbo del partido con una jugada de cuatro puntos, pero falló el tiro libre debido a una falta de Anthony Edwards.
Edwards, la estrella de los Timberwolves, estuvo a punto de conseguir un triple-doble con 29 puntos, diez rebotes y nueve asistencias. Fue respaldado por 25 puntos y cinco rebotes de Towns. El dominicano acertó cuatro de cinco triples, a pesar de las dificultades que enfrentó en el tercer partido.
En el último cuarto, Towns acertó tres triples consecutivos, a pesar de estar condicionado por cinco faltas. Fue expulsado con 1:38 minutos por jugar tras cometer su sexta falta a Doncic. El francés Rudy Gobert, por su parte, aportó un doble-doble de trece puntos y diez rebotes.
Los Mavericks no pudieron cerrar el partido en una noche en la que Kyrie Irving sólo anotó 16 puntos, a pesar de haber sido un elemento clave en las victorias anteriores de los texanos.
Dallas inició el partido con una ventaja de 3-0 en la serie, pero tras ganar tres partidos muy reñidos, con una diferencia total de solo trece puntos, la victoria de los Wolves los pone en una posición incómoda. Ahora, los Mavericks tendrán que visitar a Minnesota este jueves, donde se espera un ambiente muy competitivo.
Los Timberwolves salieron al ataque desde el comienzo, liderados ofensivamente por Anthony Edwards, quien anotó 17 puntos en la primera mitad. La defensa de los Wolves fue muy agresiva, con constantes dobles a Doncic e Irving.
A pesar de tener una ventaja de doce puntos en el primer cuarto tras una racha de 14-2, los Mavericks lograron encontrar formas de atacar a la defensa rival. Lo hicieron al ritmo de Doncic, quien, además de sus 17 puntos en la primera mitad, movió el balón con rapidez junto a Irving, dando ritmo a sus compañeros. Dante Exum y Maxi Kleber, en su regreso tras una lesión, anotaron sus primeros puntos de la serie.
Doncic se destacó con asistencias espectaculares, y los Mavs lograron dos rachas de 9-0 y 10-0 que les dieron una ventaja de 42-40. Sin embargo, entraron al descanso con un empate a 49. Otra victoria para los Mavs fue en las faltas, con Towns y Gobert acumulando tres cada uno a la mitad del partido.
En la segunda mitad, Towns se activó con veinte puntos y sus tres triples consecutivos dieron a los Wolves una ventaja de 98-92 que los Mavericks no pudieron remontar.
Un impresionante tiro en suspensión de Edwards llevó el marcador a 102-97. A pesar del susto final por la posible jugada de cuatro puntos de Doncic, los Wolves lograron asegurar su regreso a Minnesota para jugarse la vida en el próximo partido.