El líder del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, ha insinuado en una entrevista con Onda Cero que prefiere hablar sobre la esposa del presidente del Gobierno, Begoña Gómez, y otros empresarios supuestamente vinculados a ella en un presunto caso de tráfico de influencias, que de los temas que realmente importan a nivel europeo y global. Esta táctica se produce en un contexto en el que España se prepara para las elecciones europeas del 9 de junio.
Aunque Feijóo ha defendido su enfoque, alegando que ya había demasiados oradores en la Puerta de Alcalá el día de la entrevista, sus críticos le han reprochado su falta de discurso. Además, le han cuestionado por su apoyo a Vox y a la ultraderecha en pactos para numerosos gobiernos autonómicos y locales, y por sus justificaciones para las políticas de la derechista italiana Giorgia Meloni. En respuesta, Feijóo ha vuelto a criticar a Pedro Sánchez, acusándolo de ser un «vendido» por conceder una amnistía a los independentistas catalanes.
Feijóo parece disfrutar de la campaña permanente, asistiendo a mítines en toda España y concediendo entrevistas a medios afines. Ha sugerido que la verdadera candidata rival a las elecciones europeas debería ser Begoña Gómez, a pesar de que no está oficialmente imputada ni investigada en el caso de presunto tráfico de influencias. Su nombre ha sido mencionado por el pseudosindicato ultra Manos Limpias, que ha denunciado a diversas figuras públicas. A pesar de las aclaraciones realizadas por el entrevistador, Carlos Alsina, Feijóo ha seguido insistiendo en criticar a Gómez y a Sánchez.
Las elecciones europeas a menudo son consideradas como «de segundo orden», después de las generales, autonómicas y locales. Sin embargo, han servido en ocasiones como plataforma para la irrupción de nuevas fuerzas políticas y líderes, así como para reflejar los problemas más profundos de la sociedad española. En esta elección, Feijóo y el PP ven a la candidata del PSOE, la vicepresidenta Teresa Ribera, como la encarnación de su verdadero enemigo: Pedro Sánchez.
Feijóo ha cuestionado la decisión de Sánchez de comparecer en el Congreso para tratar temas como el reconocimiento de Palestina, los últimos Consejos Europeos y la negociación con el Reino Unido sobre Gibraltar. También ha criticado que entre las 32 cartas de recomendación firmadas por Begoña Gómez a favor de una empresa que luego recibió contratos de la Administración, se encontrara una entidad como el Ayuntamiento de Madrid, gobernado por el PP.
El Juez Juan Carlos Peinado ha impulsado una investigación contra Begoña Gómez, citando a seis nuevos testigos. Entre ellos se encuentran cuatro empleados y cargos de Red.es, organismo dependiente del Ministerio para la Transformación Digital, que concedió ayudas públicas a una Unión Temporal de Empresas (UTE) vinculada al empresario Juan Carlos Barrabés. Este último había participado previamente en un máster dirigido por Gómez.
La obsesión de Feijóo y su equipo por Gómez y Barrabés ha sorprendido a algunos miembros del PP. Barrabés fue invitado estrella en la última convención nacional programática de ese partido en enero de 2019. La presidenta popular en Aragón, Luisa Fernanda Rudi, y el actual presidente, Jorge Azcón, han admitido tener una buena relación con Barrabés, aunque han matizado que es de carácter profesional.