En una reciente carta abierta publicada en The Times, aproximadamente 120 empresarios, ejecutivos y financieros británicos han manifestado su apoyo al Partido Laborista, subrayando la necesidad de un cambio en el liderazgo. Los firmantes criticaron la «inestabilidad, el estancamiento y la falta de visión a largo plazo» que, según ellos, han caracterizado a los gobiernos conservadores durante la última década. Esta toma de posición colectiva se produce en un momento crítico, ya que parece respaldar la campaña de Rachel Reeves, aspirante a secretaria del Tesoro y defensora del concepto de «securonomics», un término acuñado por ella misma que define su credo socialdemócrata de «seguridad para las empresas y seguridad para las familias».
Reeves, licenciada por la London School of Economics y con experiencia en el Banco de Inglaterra y en la banca privada, ha estado cortejando a la clase empresarial británica durante más de dos años. En su reciente lanzamiento de campaña, la economista de 45 años subrayó su compromiso de aplicar la misma meticulosidad a las finanzas nacionales que aprendió examinando los extractos bancarios con su madre. Proclamó que el Partido Laborista se convertirá en «el socio natural de las empresas».
Entre los firmantes de la carta se encuentran personalidades notables como Jimmy Wales, fundador de Wikipedia; Andrew Higginson, presidente de JC Sports; John Holland, ex director ejecutivo del aeropuerto de Heathrow y Andy Palmer, ex director ejecutivo de Aston Martin. Todos ellos comparten la creencia en el potencial del Reino Unido para ser una de las economías más fuertes del mundo y la necesidad de una nueva perspectiva para romper el estancamiento de la última década.
Sin embargo, los conservadores no tardaron en señalar la ausencia de grandes empresas del FTSE 100 de la Bolsa de Londres en la lista de apoyo al Partido Laborista. Observaron que la lista estaba dominada por exdirectivos, como Malcolm Walker, fundador de la cadena de supermercados Iceland, que en 2015 firmó una carta similar de apoyo a los conservadores.
El primer ministro, Rishi Sunak, ha basado su campaña en el lema «el plan está funcionando», respaldado por un crecimiento del 0,6% en el primer trimestre de 2024 y una caída de la inflación al 2,3% en abril. Sin embargo, Reeves argumentó que precisamente el hecho de que Sunak haya convocado elecciones es una señal de que el plan económico no está funcionando. Señaló el alto nivel de presión fiscal, la duplicación de la deuda nacional y el aumento de las hipotecas como indicativos de un mal manejo económico.
Reeves también destacó que si la economía británica hubiera crecido al ritmo de la media de los países de la OCDE en los últimos 14 años, ahora sería 150.000 millones de libras mayor. Afirmó que el crecimiento económico del Reino Unido ha sido menor que el de otras economías comparables debido a las decisiones tomadas por los conservadores.
A pesar de las críticas, Reeves ha evitado mencionar el Brexit, uno de los temas más delicados de la campaña electoral. También ha descartado la posibilidad de nuevos impuestos y un presupuesto de emergencia antes del receso veraniego si los laboristas ganan las elecciones. Se ha presentado a sí misma como una firme defensora de «unos fuertes servicios públicos» y se ha autodefinido como «socialdemócrata» en lugar de «socialista».
Aseguró que el Partido Laborista está listo para cerrar el capítulo de caos y declive e iniciar un nuevo capítulo para el Reino Unido. Y aseguró que «las empresas quieren trabajar con nosotros».
Jimmy Wales, fundador de Wikipedia, ha sido uno de los rostros más visibles en defensa del cambio del Partido Laborista desde la era de Jeremy Corbyn. Wales argumentó que no se trata de un gobierno de extrema izquierda, sino de un gobierno sólido y centrista. Afirmó que tanto Reeves como Keir Starmer, líder del Partido Laborista, están comprometidos con una gestión sensata del país.
En un giro desafortunado, The Financial Times reveló que el libro de Reeves, Las mujeres que hicieron la economía moderna, contenía al menos 20 fragmentos copiados literalmente de Wikipedia. Aunque Reeves asumió la responsabilidad del plagio y se comprometió a corregir los errores en la próxima edición, el daño a su reputación ya estaba hecho.
Reeves, cuyo marido es el ex secretario personal de Gordon Brown, Nicholas Joicey, y cuya hermana menor, Ellie Reeves, también es diputada laborista, se ha presentado ante los británicos como una candidata fuerte y capaz. Con su familia y su compromiso con el cambio, la aspirante a secretaria del Tesoro espera poder cambiar el rumbo de la economía británica.