Franco Pinto, el ex brigadista de la Conaf formalizado como el autor intelectual de los incendios en la Región de Valparaíso, ha sido acusado por la Fiscalía de tener motivaciones económicas para iniciar los incendios. Según las investigaciones, Pinto incitó al bombero Francisco Mondaca a iniciar los incendios, motivado por la diferencia en el monto que recibió antes de la emergencia y lo que ganó durante el combate a los siniestros de febrero.
Pinto fue contratado como brigadista desde el 10 de octubre de 2023, con un sueldo mensual bruto de 753.384 pesos. Este monto aumentó a 785.779 pesos mensuales a partir de enero del año siguiente. Sin embargo, es importante destacar que estos montos incluyen las horas extras que Pinto trabajó durante su tiempo en la Conaf.
Las pruebas presentadas por la Fiscalía muestran que, previo al megaincendio, Pinto había cobrado mucho menos dinero por concepto de horas extras. En octubre del año pasado, por ejemplo, solo trabajó cuatro horas extras, por las que recibió 28.126 pesos extras. En noviembre, trabajó 42 horas extras, lo que le generó un ingreso adicional de 295.327 pesos, y en diciembre sumó 50 horas extras, recibiendo 351.580 pesos.
Pero fue este año cuando sus ingresos por este concepto aumentaron significativamente. En enero recibió 456.497 pesos, producto de 63,33 horas extras, mientras que en febrero, el monto aumentó a 420.479 pesos, debido a su trabajo durante 57,33 horas extraordinarias.
Tras los incendios en la Región de Valparaíso, Franco Pinto sumó 38,5 horas extras en marzo, por las que recibió 282.357 pesos, y en abril sumó el mayor número de horas extras, con 64,5 horas, que le generaron 473.039 pesos más a su sueldo.
El director de Conaf, Christian Little, informó que el vínculo laboral de la corporación con Pinto concluyó el 30 de abril pasado. Según Little, Pinto había realizado diversos trabajos para la corporación durante la última década. No obstante, el director de Conaf enfatizó que “Pagar las horas extras no significa que uno va a provocar más incendios, como lo que ha acontecido, para poder cobrar más”.
El caso de Franco Pinto pone de manifiesto la necesidad de una mayor supervisión y control en el sector de los brigadistas forestales. Las autoridades pertinentes deben adoptar medidas efectivas para prevenir la repetición de tales incidentes en el futuro y garantizar la integridad y seguridad de nuestro patrimonio natural. La investigación del caso de Pinto sigue en curso y se espera que la justicia chilena actúe con diligencia para esclarecer los hechos y imponer las sanciones correspondientes.
En este sentido, es vital recordar que la prevención de incendios forestales y la protección de nuestros bosques es una responsabilidad compartida por todos los chilenos. Es deber de todos actuar con responsabilidad y conciencia para preservar nuestros recursos naturales y contribuir a un desarrollo sostenible para las futuras generaciones. Debemos aprender de situaciones como la de Franco Pinto para evitar que se repitan en el futuro.