El derecho a la esperanza de los palestinos y el derecho a la seguridad de los israelíes son dos caras de la misma moneda. Ambos pueblos tienen sus derechos legítimos que deben ser reconocidos y garantizados para lograr una paz duradera en la región. Las recientes tensiones en Oriente Medio, que se intensificaron desde el 7 de octubre, han demostrado que el riesgo de una escalada regional es más real que nunca. Las consecuencias de tal escalada pueden ser imprevisibles, con impactos a nivel geopolítico, económico y humanitario.
Para lograr la paz, España se ha posicionado a favor de la solución de dos Estados: Israel y Palestina. Esta solución parece ser la única forma viable de poner fin al círculo de violencia en la región. Para hacer que esta paz sea irreversible, es crucial reconocer a Palestina como Estado y como miembro de las Naciones Unidas. Este reconocimiento permitiría que una Palestina soberana coexista con Israel, cada uno viviendo en paz y seguridad.
Una solución de dos Estados no sólo es una cuestión de justicia, sino también el único camino hacia la paz. Un Estado palestino debe ser viable, unificando la Franja de Gaza y la Ribera Occidental bajo una misma Autoridad Palestina. Un corredor entre ambas zonas, una salida al mar y una capital en Jerusalén Este son condiciones esenciales para un Estado palestino viable.
España ha estado profundamente implicada en la búsqueda de una solución pacífica al conflicto. Tanto el primer ministro Pedro Sánchez como el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares Bueno, han visitado la región en varias ocasiones y han mantenido numerosas conversaciones con diversos socios regionales. España ha abogado firmemente por un alto al fuego inmediato, la liberación de los rehenes y el suministro de ayuda humanitaria a los civiles que la necesitan.
En un movimiento significativo, España ha decidido reconocer al Estado de Palestina. Esta decisión está impulsada por la necesidad de paz y justicia, así como por la esperanza de un futuro mejor. El reconocimiento del Estado palestino es también esencial para la seguridad de Israel. La paz en la región y la seguridad de Israel están intrínsecamente vinculadas a la esperanza del pueblo palestino de tener su propio Estado.
El Parlamento español ya instó al gobierno a reconocer el Estado de Palestina en noviembre de 2014, y esta decisión está profundamente arraigada en la sociedad española. España ha propuesto la celebración de una Conferencia Internacional de Paz para avanzar hacia la materialización de la solución de dos Estados. Esta propuesta ha sido respaldada por la Unión Europea, la Liga de Estados Árabes, la Organización de Cooperación Islámica y más de 80 países.
La admisión del Estado de Palestina como miembro pleno de la Organización de las Naciones Unidas sería un paso crucial para garantizar la solución de dos Estados. La mayoría de los miembros de la ONU ya han reconocido a Palestina como Estado, y España está lista para seguir su ejemplo.
El pueblo palestino no puede seguir esperando. Desde 1948, las Naciones Unidas han estado trabajando para mantener la paz en Palestina. Después de 76 años, es hora de resolver este problema. No podemos ignorar el sufrimiento de cientos de miles de personas que carecen de alimentos, agua, medicinas y alojamiento. Más de 100 rehenes están en manos de Hamás y miles de vidas inocentes se han perdido debido a la violencia.
Es de justicia para Palestina tener su propio Estado y el lugar y la existencia de Israel deben ser reconocidos por todos aquellos que aún no lo han hecho. Esta es la mejor garantía de seguridad para Israel y la primera y fundamental condición para un futuro de paz y prosperidad en la región. Estos son los valores que la comunidad internacional debe apoyar y defender, y son los que guían el compromiso de España con Palestina.