Los recientes sondeos indican un cambio notable en el panorama político de los Estados Unidos: el ex presidente Donald Trump está ganando terreno entre los votantes latinos. A primera vista, esto podría parecer sorprendente, ya que durante la última década, este grupo demográfico ha apoyado en gran medida al Partido Demócrata. Sin embargo, las encuestas muestran que los latinos se están convirtiendo en un electorado políticamente dividido y decisivo.
En las elecciones presidenciales de 2016 y 2020, los votantes latinos se opusieron a Trump en una relación de dos a uno. En la primera instancia, votaron en masa por Hillary Clinton, quien ganó con un margen de 38 puntos sobre Trump. En las elecciones de 2020, a pesar de que los votos por Joe Biden disminuyeron ligeramente, todavía logró una ventaja de 33 puntos sobre Trump.
No obstante, las encuestas sugieren que las elecciones de 2024 podrían tener un resultado diferente. La ventaja de Biden sobre Trump entre los votantes latinos se ha reducido considerablemente. De acuerdo con la última encuesta de Pew Research, Biden solo lidera por ocho puntos; y según Siena/NYT, por apenas tres puntos.
Algunos latinos que votaron por Biden en 2020 han expresado su intención de cambiar su voto a favor de Trump si se presenta a las elecciones. Según Pew Research, esto es lo que afirma hasta el 14% de todos los latinos que votaron en 2020 por Biden. Por otro lado, apenas un 5% de votantes republicanos aseguran que votarán por Biden.
Una posible explicación para este cambio es la creciente impopularidad de Joe Biden. El porcentaje de latinos que tienen una visión desfavorable de Biden ha aumentado desde 2021, pasando del 40% al 52%. Al mismo tiempo, el rechazo hacia Trump ha disminuido ligeramente, del 60% al 58%. Hace cuatro años, los latinos rechazaban a Trump en una proporción mayor que a Biden (60% a 40%); ahora, los rechazan casi por igual (56% a 52%).
Este desapego hacia Biden parece ser particularmente fuerte, ya que los latinos siguen prefiriendo al «candidato demócrata» en sus distritos locales. Cuando se les preguntó en una encuesta de YouGov sobre unas elecciones al Congreso que se celebraran hoy, los latinos se decantaron en una proporción del 47% al 33% por los demócratas. Esto podría interpretarse de dos maneras: o bien Biden es impopular y su candidatura costará votos al partido, o bien, a pesar de su impopularidad, muchos latinos que simpatizan con el partido demócrata terminarán votando por él.
Las encuestas sugieren que es probable que Trump mejore entre los votantes latinos en comparación con 2020, pero esto plantea dos incógnitas esenciales. La primera es la magnitud de este cambio (según los pronosticadores de Metaculus, Trump rondará el 43% del voto latino, aunque bien podría quedarse en 39% o saltar al 47%). La segunda incógnita es en qué estados se producirá este cambio.
La población latina ha crecido significativamente en los últimos años, triplicando su peso en el censo desde finales de los noventa, pasando del 4% al 13%. Para los demócratas, los latinos son esenciales: uno de cada siete simpatizantes demócratas es latino.
Los latinos pueden ser decisivos en los estados de Arizona y Nevada. Ambos estados cumplen dos condiciones: tienen una población latina significativa (más del 25%) y son lugares donde las fuerzas de republicanos y demócratas están igualadas. Según Metaculus, los demócratas son ligeramente favoritos para retener Arizona y Nevada, con apenas un 52% y 53% de probabilidad respectivamente.
Los estados de Wisconsin, Michigan, Pensilvania, Georgia y Carolina del Norte también son considerados estados en disputa, pero en ninguno de ellos los latinos representan más del 6% de la población.
Finalmente, es importante observar a Texas. Aunque los republicanos han ganado en este estado en todas las elecciones presidenciales desde 1980, su margen de victoria ha disminuido constantemente. En 2000, ganaron por 21 puntos, y en 2020, por apenas 6 puntos. En esta transformación ha sido clave el crecimiento de la población latina, que hoy constituye un tercio de todos los votantes. Según Metaculus, es probable que los republicanos vuelvan a ganar, pero ahora tienen un 6% de posibilidades de perder.
Estas cifras y tendencias sugieren un panorama político en constante evolución en los Estados Unidos, con los latinos desempeñando un papel cada vez más influyente. Su creciente participación y su cambio en las preferencias políticas pueden tener un impacto significativo en las próximas elecciones.