El baloncesto es un deporte de montaña rusa lleno de expectativas, ilusión, apuestas, éxitos y desengaños. En medio de este torbellino, se encuentra la carrera de Juancho Hernangómez, un jugador que ha tenido su cuota de altibajos. Para él, Berlín trae recuerdos inmejorables, ya que fue aquí donde alcanzó el punto culminante de su carrera hace cinco años en el Eurobasket, donde junto a su hermano Willy, fueron nombrados MVP del torneo y MVP de la final respectivamente.
Este viernes, Hernangómez disputará la primera Final Four de su carrera en la Euroliga, tras un año lleno de zigzagueos en la NBA. Su participación será crucial para el Panathinaikos AKTOR, un equipo que ha logrado volver a la lucha por la Euroliga tras 12 años, gracias en parte a los esfuerzos de jugadores como Hernangómez, Kostas Sloukas, Mathias Lessort y Kendrick Nunn.
Sin embargo, la contribución de Hernangómez al equipo no ha estado exenta de críticas. A pesar de ser uno de los fichajes estrella del equipo, su impacto en el campo no ha sido el esperado. Sus números en la Euroliga son modestos, con un promedio de poco más de 16 minutos de juego, 4,3 puntos, 3,6 rebotes y apenas un 27% en triples. Aunque estos números pueden parecer decepcionantes, es importante recordar que Hernangómez ha aceptado su papel en la segunda unidad del equipo y ha trabajado duro para contribuir al éxito del Panathinaikos.
Además, Hernangómez ha tenido que lidiar con problemas de salud. Durante la serie de cuartos de final contra el Maccabi, jugó un partido con el rostro visiblemente hinchado debido a una fuerte sinusitis. A pesar de su enfermedad, Hernangómez demostró su compromiso con el equipo y jugó a pesar de todo, contribuyendo con nueve rebotes. Tras este partido, fue hospitalizado durante 10 días y regresó para el quinto y definitivo partido de la serie, donde aportó 11 puntos.
A pesar de los desafíos, Hernangómez está listo para enfrentarse a la Final Four de la Euroliga con la determinación de dar lo mejor de sí mismo. Como dijo recientemente: «Juego todo el año para estos momentos. Tengo grandes recuerdos. Ojalá acabemos igual que entonces».
Después de la Final Four, Hernangómez se preparará para un ajetreado verano con la selección española, con el importante Preolímpico de Valencia a comienzos de julio. A pesar de los rumores de un posible cambio de aires, Hernangómez tiene un contrato de un año más con el Panathinaikos y está decidido a dar lo mejor de sí mismo en el campo, independientemente de dónde juegue.
La carrera de Hernangómez es un ejemplo de la montaña rusa que puede ser el baloncesto profesional. A pesar de los altibajos, sus logros demuestran que con trabajo duro y dedicación, es posible superar los desafíos y tener éxito en este deporte competitivo. Con la Final Four a la vuelta de la esquina, Hernangómez tiene la oportunidad de añadir otro capítulo memorable a su carrera en Berlín, la ciudad que le trae tan buenos recuerdos.