Microsoft lanzó Windows XP en octubre de 2001 y a pesar de tener sucesores como Windows Vista y Windows 7, este sistema operativo ha dejado una huella indeleble en la memoria de los usuarios. Aunque ha transcurrido un tiempo considerable desde su lanzamiento y ha sido sucesivamente eclipsado por las versiones más recientes del sistema operativo de Microsoft, se puede argumentar que Windows XP está entre los mejores sistemas operativos de Microsoft.
Windows XP fue un sucesor directo de Windows Me, un sistema operativo que no gozó de la misma popularidad y que facilitó que Windows XP dejara una impresión duradera entre los usuarios. A su vez, XP fue sucedido por Windows Vista, que no fue tan bien recibido como su predecesor. Incluso se extendió el ciclo de vida de XP hasta el 8 de abril de 2014, lo que permitió a muchos usuarios pasar directamente a Windows 7, evitando así la versión Vista.
La era de Windows XP fue también un tiempo en el que el mundo se despertó a la realidad de la ciberseguridad. Aunque el malware existía desde la década de los 80, fue durante la primera década del siglo XXI, durante la era de XP, cuando se produjo un incremento en la conciencia global sobre los riesgos de la ciberseguridad. Este cambio de conciencia se debió en gran medida a la expansión de Internet. De repente, todos estábamos conectados y expuestos a las amenazas cibernéticas.
En los días de Windows XP, la combinación de sentido común y las funciones de seguridad del sistema operativo, junto con una configuración adecuada y algunas herramientas de seguridad, eran generalmente suficientes para combatir las amenazas. Pero desde entonces, el panorama de la ciberseguridad se ha vuelto más complejo y peligroso.
Un youtuber llamado Eric Parker hizo recientemente una prueba conectando una instalación de Windows XP en una máquina virtual a Internet. Los resultados fueron escalofriantes. En cuestión de minutos, el sistema fue inundado por malware. Incluso una versión legacy de Malwarebytes, una popular herramienta de seguridad, fue incapaz de detener la avalancha de patógenos cibernéticos.
Este experimento sirve como una advertencia para aquellos nostálgicos que deseen revivir la experiencia de un sistema operativo clásico como Windows XP. Puedes hacerlo, pero bajo ninguna circunstancia deberías conectarlo a Internet. Si decides ignorar esta advertencia, las consecuencias pueden ser nefastas.
No cabe duda de que Windows XP fue un sistema operativo revolucionario en su momento. Su legado sigue vivo en los corazones de muchos usuarios que lo recuerdan con afecto. Sin embargo, en el mundo moderno de la ciberseguridad, Windows XP es un dinosaurio que no está equipado para luchar contra las amenazas actuales.
Así que, si decides revivir tu vieja máquina con Windows XP, recuerda: está bien para jugar a viejos videojuegos o escribir sin distracciones, pero mantenerlo desconectado de Internet es la única forma de garantizar su seguridad. Aunque sea tentador revivir los viejos tiempos, en el mundo de la tecnología, a veces es mejor dejar el pasado en el pasado.