El lunes 20 de mayo de 2024, los gobiernos de Colombia y Brasil han expresado su solidaridad y profundo pesar por la trágica muerte del presidente de la República Islámica de Irán, Seyed Ebrahim Raisi, el ministro de Asuntos Exteriores, Hosein Amir Abdolahian, y otras autoridades que viajaban con ellos en un helicóptero, el cual se estrelló el domingo 19 de mayo de 2024.
En un comunicado oficial, el gobierno de Colombia lamentó «profundamente» la pérdida de estas personalidades iraníes, y compartió sus «sentimientos de condolencias» con las familias de las víctimas, así como con el pueblo iraní en general. Esta demostración de apoyo y solidaridad también se extendió a las autoridades iraníes y a todos los afectados por este trágico suceso.
En el mismo sentido, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, también expresó su pesar por la muerte del presidente iraní y su ministro de Asuntos Exteriores. En su declaración, Lula da Silva mencionó: “Con pesar me enteré de la confirmación del martirio del presidente iraní, Ebrahim Raisi, y de su ministro de Asuntos Exteriores, Hosein Amir Abdolahian, y de todos los pasajeros y la tripulación, tras el accidente de su helicóptero. Mi más sentido pésame a las familias de todas las víctimas, al Gobierno y al pueblo de Irán”.
El accidente ocurrió cuando el presidente Raisi regresaba de la provincia noroccidental iraní de Azerbaiyán Oriental, donde había inaugurado una presa en compañía de su homólogo azerbaiyano, Ilham Aliyev. Debido a las duras condiciones climáticas, el helicóptero en el que viajaba Raisi se vio obligado a realizar un aterrizaje forzoso en su camino de regreso a la capital provincial, Tabriz. En este incidente, desafortunadamente, perdieron la vida el mandatario iraní, su canciller y todos los demás pasajeros y tripulantes.
Tras el accidente, se llevó a cabo una intensiva operación de búsqueda que duró toda la noche. Los cuerpos de las víctimas fueron encontrados el lunes, tras una exhaustiva búsqueda que involucró a numerosos equipos de rescate. La noticia del accidente y la confirmación de la muerte del presidente iraní y de su ministro de Asuntos Exteriores ha causado un gran impacto internacional, y las expresiones de condolencias y apoyo desde diferentes partes del mundo han sido inmediatas.
El presidente Raisi, figura destacada en la política iraní y respetado por su pueblo, deja un importante vacío en la dirección del país. Su pérdida es un duro golpe para Irán y para la comunidad internacional. El ministro de Asuntos Exteriores, Hosein Amir Abdolahian, también era una figura muy respetada en el ámbito de la diplomacia iraní. Su muerte representa una pérdida significativa para la política exterior de Irán.
La tragedia es un doloroso recordatorio de los riesgos que a veces enfrentan los líderes mundiales en el ejercicio de sus funciones, y ha dejado un profundo sentido de tristeza y pérdida en muchos. Las condolencias y muestras de solidaridad de los gobiernos colombiano y brasileño, entre otros, reflejan la estatura internacional de las personalidades perdidas y la significativa influencia que tenían en la esfera global.