El universo del software está lleno de sorpresas y desafíos ocasionales, y uno de los titanes de este mundo, Microsoft, no es una excepción. En las últimas semanas, ha habido una serie de incidentes que han puesto a prueba la relación de su más reciente sistema operativo, Windows 11, con las redes VPN.
Para aquellos que están un poco detrás en la actualidad tecnológica, a principios de este mes, hubo informes de que las actualizaciones lanzadas por Microsoft para su sistema operativo de escritorio estaban causando problemas en las conexiones a Internet a través de las redes privadas virtuales. El problema no solo se limitó a una versión única del sistema operativo. Algunas de las versiones afectadas fueron Windows 11 22H2/23H2 (KB5036893), Windows 11 21H2 (KB5036894) y Windows 10 (KB5036892) para los clientes. Mientras que en los servidores, las versiones eran Windows Server 2022 (KB5036909), Windows Server 2019 (KB5036896), Windows Server 2016 (KB5036899), Windows Server 2012 R2 (KB5036960), Windows Server 2012 (KB5036969), Windows Server 2008 R2 (KB5036967) y Windows Server 2008 (KB5036932).
Lo intrigante de este problema es que no es la primera vez que ocurre. Hace aproximadamente un año, hubo un problema similar con Windows 11 y las redes VPN. En esa ocasión, aunque era posible establecer la conexión, la calidad era tan deficiente que la velocidad se reducía a mínimos, e incluso podía terminar cerrándose automáticamente. Al igual que el año pasado, la única solución que Microsoft inicialmente ofrecía era revertir la instalación de las actualizaciones que causaban el problema.
Estos problemas recurrentes subrayan el consejo general de no instalar actualizaciones recién publicadas hasta que hayan pasado por un período de prueba. Este consejo ha ganado aún más peso dado que estos problemas también parecen presentarse en las actualizaciones de seguridad, que normalmente se recomienda instalar con prontitud. Sin duda, es un recordatorio para Microsoft de que necesita abordar los problemas que tiene con las actualizaciones de Windows.
En una nota más positiva, parece que ya hay una solución a la vista. Según las notas de la actualización KB5037771, su instalación resolverá los problemas de Windows 11 con las redes VPN. Esta actualización ya está disponible para todos aquellos usuarios que se vieron afectados por las actualizaciones mencionadas anteriormente y se puede encontrar tanto a través de Windows Update como en el catálogo de actualizaciones de Microsoft.
Sin embargo, no puedo evitar cuestionar si este problema está de alguna manera relacionado con el del año pasado. Además, es notable que, dado dicho precedente, Microsoft no realizó las pruebas necesarias para verificar que la actualización del mes pasado no afectara a las redes VPN, que son un tipo de conexión/servicio clave en el día a día de muchas personas. Esperemos que esta vez, la solución sea definitiva.
En el mundo acelerado de la tecnología, es fácil olvidar que incluso los gigantes como Microsoft pueden enfrentarse a contratiempos. Sin embargo, lo más importante es aprender de los errores pasados y tomar las medidas necesarias para prevenir problemas similares en el futuro. Si hay una lección que aprender de todo esto, es la importancia de las pruebas exhaustivas antes de lanzar cualquier actualización, especialmente cuando se trata de un sistema operativo tan utilizado como Windows.
