Un reciente metaanálisis de estudios ha proporcionado un renovado impulso a la conocida frase «camina y serás saludable», confirmando que caminar un mínimo de 4000 pasos al día reduce significativamente el riesgo de muerte prematura. Este estudio, liderado por el Dr. Maciej Banach, primer autor y redactor jefe adjunto de la Sociedad Europea de Cardiología, viene a reforzar la importancia de mantener una actividad física regular y moderada para preservar la salud.
El estudio, publicado en la revista European Journal of Preventive Cardiology, ha demostrado que cada incremento de 1000 pasos diarios se asocia a una reducción del 15% del riesgo de morir por cualquier causa. Además, cada incremento de 500 pasos diarios se asocia a una reducción del 7% de la mortalidad por enfermedad cardiovascular. El Dr. Banach ha destacado que estos resultados son consistentes independientemente del país de residencia o del género de los participantes.
Esta investigación ha trascendido también la barrera de la edad. Aunque los beneficios para la salud son los mismos tanto para los mayores de 60 años como para los más jóvenes, la magnitud de la reducción del riesgo de muerte fue menor en los mayores de 60 años que en los menores. Sin embargo, la investigación no deja lugar a dudas: caminar es beneficioso para todos, independientemente de la edad.
El estudio también ha revelado que realizar menos de 5000 pasos al día se considera un «estilo de vida sedentario». Este hallazgo pone de relieve la importancia de mantener una actividad física regular, incluso si es de baja intensidad, como caminar.
Además, el estudio ha subrayado que el impacto en la reducción del riesgo de muerte prematura es mayor cuando se camina más de 7000 pasos al día. Pero la mayor sorpresa la encontramos en que el mayor beneficio se produjo a partir de unos 20 000 pasos diarios. Aunque puede parecer una cifra elevada, caminar es una actividad que se puede integrar fácilmente en nuestra vida diaria, y que no requiere de un equipo especial ni de una preparación física particular.
Es importante destacar que esta investigación no es un caso aislado. En realidad, se suma a un cuerpo creciente de evidencia científica que respalda los beneficios de la actividad física regular y moderada. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda a los adultos realizar al menos 150 minutos de actividad física moderada a la semana, o 75 minutos de actividad física intensa. Caminar es una forma efectiva de cumplir con estas recomendaciones.
En el mundo actual, donde el sedentarismo es un problema creciente debido al aumento de trabajos de oficina y al uso creciente de tecnología, este estudio es un recordatorio oportuno de la importancia de mantenerse activo. Las implicaciones para la salud pública son claras: promover un estilo de vida activo, incluyendo caminar a un ritmo moderado de forma regular, puede ser una estrategia efectiva para reducir la mortalidad prematura.
Debemos tener en cuenta que caminar no sólo es beneficioso para la salud física. También se ha demostrado que caminar puede tener un impacto positivo en la salud mental, mejorando el estado de ánimo, reduciendo los síntomas de ansiedad y depresión, e incluso mejorando la calidad del sueño.
En resumen, este estudio proporciona una valiosa evidencia científica de los beneficios de caminar. Los hallazgos respaldan la recomendación de caminar al menos 4000 pasos diarios para reducir significativamente el riesgo de muerte prematura. Sin embargo, cuanto más se camina, mayores son los beneficios para la salud. Es importante recordar que el objetivo no debe ser necesariamente alcanzar un número mágico de pasos, sino simplemente mantenerse activo y evitar llevar un estilo de vida sedentario.
