Mercedes ha tomado la decisión de no continuar con el desarrollo de la plataforma MB.EA, una plataforma que estaba en desarrollo y que iba a ser la base para futuros modelos de Clase E y Clase S. Esta decisión se ha tomado debido a una deceleración en la demanda de vehículos eléctricos. En su lugar, la marca alemana se centrará en el desarrollo de la plataforma actual, la EVA2, que es la base sobre la que se construyen los actuales vehículos eléctricos de la marca.
El medio Handelsblatt informó el pasado lunes 13 de mayo de que los motivos económicos son la principal razón por la que Mercedes ha tomado esta decisión. La plataforma MB.EA no se habría lanzado hasta el año 2028, lo que habría dado a los modelos actuales tiempo de sobra para seguir siendo comercializados.
Mercedes cree que seguirá desarrollando modelos de combustión junto a los eléctricos hasta finales de la presente década y más allá. Esta visión está en contraste con las expectativas iniciales que se tenían a principios de la década. La marca alemana espera que las tendencias del mercado y las preferencias de los clientes jueguen un papel importante en la dirección que tomará la industria de los automóviles.
A pesar del cambio de planes, Mercedes sigue teniendo una visión optimista sobre la electrificación. La marca espera que para el año 2030, los vehículos eléctricos y los híbridos enchufables constituyan al menos la mitad de sus ventas totales. Sin embargo, también señalan que la falta de demanda llevará a que los vehículos eléctricos sigan siendo más caros que los de combustión.
Además de la falta de demanda, hay otros factores que están jugando en contra de Mercedes. Entre ellos se encuentran la competencia de los fabricantes chinos y Tesla, así como los crecientes costos de desarrollo de su sistema operativo MB.OS. Mercedes también se encuentra en medio de un cambio de paradigma, ya que su intención es operar más como una agencia, lo que le permitiría controlar su inventario y ofrecer precios fijos a través de ventas online.
Las matriculaciones de vehículos electrificados continúan creciendo, pero a un ritmo lento en comparación con los vehículos híbridos tradicionales. Según datos de ANFAC, este crecimiento lento se ha notado también en otros países europeos. En Francia y Alemania, por ejemplo, el final de las ayudas gubernamentales ha provocado un descenso marcado en las matriculaciones de vehículos eléctricos e híbridos enchufables. Este cambio en las tendencias de matriculación ha llevado a un cambio en las expectativas de los fabricantes de automóviles.
La decisión de Mercedes de abandonar el desarrollo de la plataforma MB.EA es un indicador de los retos a los que se enfrenta la industria de los vehículos eléctricos. La falta de demanda, la competencia de los fabricantes chinos y los elevados costos de desarrollo son algunos de los factores que están frenando la transición hacia los vehículos eléctricos. Sin embargo, a pesar de estos desafíos, Mercedes sigue comprometida con la electrificación y espera que para el año 2030, los vehículos eléctricos y los híbridos enchufables constituyan al menos la mitad de sus ventas totales.