El mundo del boxeo está en constante evolución, con emocionantes peleas y controversias que mantienen a los fanáticos en vilo. Recientemente, un desarrollo interesante ha surgido en el ámbito del boxeo profesional con el boxeador estadounidense Devin Haney haciendo una demanda audaz a la Comisión Atlética del Estado de Nueva York.
La demanda de Haney se produce después de su sorpresiva derrota ante Ryan García, un rival que superó todas las expectativas y ganó la pelea. La controversia surgió cuando, días después del combate, surgieron informaciones que afirmaban que García había dado positivo por Ostarine en un control antidoping realizado previo a la pelea. Este hallazgo ha llevado a Haney a pedir a la Comisión Atlética que le conceda la victoria por descalificación si la muestra B de García resulta también positiva.
La Ostarine es una sustancia que se utiliza para aumentar la resistencia y la fuerza muscular, y su presencia en el cuerpo de un boxeador puede darle una ventaja injusta en el ring. El resultado de la muestra de García está pendiente de una segunda prueba, que está programada para el día 22. Si esta muestra también resulta positiva, la pelea podría ser declarada no contest por los oficiales de la Comisión.
Para Devin Haney, este potencial resultado de «no contest» sería injusto. Según él, García ya tenía una ventaja indebida antes de la pelea, ya que no dio el peso correcto y llegó al ring con más peso intencionadamente. Esta acción, junto con la presencia de Ostarine en su cuerpo, lleva a Haney a creer que su registro debería reflejar una «victoria por descalificación» sobre García.
Ryan García, por su parte, ha admitido que no marcó el peso intencionadamente y que, a sabiendas de las consecuencias, pagó una multa de 1,5 millones de dólares por esta infracción. Sin embargo, se defiende firmemente en lo que respecta a la presencia de Ostarine en su cuerpo. García afirma que nunca tomó sustancias para mejorar el rendimiento y que la presencia de Ostarine es un error.
La situación se complicará aún más si la prueba B de García resulta positiva el 22 de mayo. En este caso, García sería despojado de su victoria y podría enfrentar una sanción severa que lo alejaría del ring durante un largo periodo de tiempo. A pesar de la petición de Haney, lo más probable es que la pelea sea declarada «no contest» por los oficiales de la Comisión.
Este caso pone de manifiesto la importancia de las pruebas antidoping en el boxeo y cómo estas pueden afectar no solo al resultado de una pelea, sino también al legado de un boxeador. En última instancia, cabe destacar que la integridad del deporte debe prevalecer por encima de todo, y cualquier indicio de juego sucio debe ser tratado con la máxima seriedad. Para los fanáticos del boxeo, esta situación es un recordatorio de que en el deporte, al igual que en la vida, no hay atajos para el éxito.