El subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, y el general director de Carabineros, Ricardo Yáñez, anunciaron un nuevo desarrollo en la política de seguridad de Chile, marcando un hito en la historia de la fuerza policial. Un nuevo proyecto ha sido aprobado, otorgando a los estudiantes de carabineros la autorización para portar sus armas de servicio mientras prestan servicios.
La nueva medida no solo aumentará la presencia policial en las calles, sino que también proporcionará a los aspirantes a carabineros un equipo más sofisticado y competente. Además, este proyecto permitirá la adquisición de nuevo armamento automático y otros implementos para mejorar la instrucción de los futuros oficiales.
El proyecto es una iniciativa parlamentaria respaldada por el gobierno, lo que permitió que su tramitación en el Congreso fuera expedita. Según Monsalve, “La gente quiere más presencia policial en la calle, pero esa presencia tiene que ser acompañada del equipamiento y las competencias necesarias».
De manera específica, el proyecto permitirá a los estudiantes de tercer y cuarto año de la escuela de carabineros portar un arma de servicio. Mientras que los estudiantes de segundo año solo podrán portar armas durante sus prácticas profesionales. Con estas nuevas directrices, se espera que se beneficien 1.100 alumnos actuales de carabineros. Sin embargo, antes de poder portar un arma de fuego, los estudiantes deben certificar sus habilidades con estas armas.
En un esfuerzo por mejorar la formación y la competencia de los carabineros, el gobierno también se ha comprometido a invertir 10 mil millones de pesos para proporcionar a la fuerza policial nuevas instalaciones de entrenamiento. Estas instalaciones incluirán polígonos de tiro virtuales, con el objetivo de tener 19 nuevos polígonos de tiro de este tipo instalados en el país para finales de este año.
Este cambio en la política de seguridad también afecta la legislación que protege a los carabineros. Los estudiantes de carabineros que ahora pueden portar armas de fuego también estarán protegidos por la nueva Ley Naín-Retamal. Esta ley otorga el estatus de funcionario a los estudiantes que están en periodo de práctica mientras realizan sus labores.
En resumen, este nuevo proyecto representa un cambio significativo en la política de seguridad de Chile. Al permitir a los estudiantes de carabineros portar armas de fuego, el gobierno espera aumentar la presencia policial en las calles y proporcionar a los futuros oficiales una formación más completa y competente. A pesar de las críticas y preocupaciones que puedan surgir, el gobierno está demostrando su compromiso con la seguridad y el fortalecimiento de su fuerza policial.