El baloncesto profesional está repleto de momentos emocionantes y el último enfrentamiento entre los actuales campeones de la NBA, los Denver Nuggets, y los Minnesota Timberwolves no fue una excepción. El domingo, los Nuggets lograron una victoria a domicilio sobre los Timberwolves, igualando su serie de semifinales de la Conferencia Oeste 2-2. En una situación similar, los Indiana Pacers también vencieron a los New York Knicks para nivelar su serie en la Conferencia Este.
El jugador más valioso de la NBA, el serbio Nikola Jokic, fue una vez más el centro de atención, liderando a los Nuggets con 35 puntos. Jokic, que ha sido un pilar en el éxito de los Nuggets, mostró por qué es considerado uno de los mejores jugadores de la liga. El apoyo vino de Aaron Gordon, que anotó 27 puntos, y Jamal Murray, que contribuyó con 19 puntos.
Gordon, con una eficiencia despiadada, convirtió 11 de sus 12 tiros al aro, mientras que Murray, con su estilo de juego inquebrantable, aportó una segunda victoria consecutiva en Minneapolis a los Nuggets. Esta victoria permitió a los Nuggets recuperar la ventaja de la localía tras perder los dos primeros juegos de la serie en Denver.
«Ahora es al mejor de tres», declaró Jokic, quien también señaló que las sorprendentes victorias de los Timberwolves en los dos primeros partidos en Denver sólo habían fortalecido a los campeones defensores. Jokic y su equipo están ansiosos por el quinto partido de la semifinal que se jugará el martes en Denver.
A pesar de los 44 puntos de Anthony Edwards, estrella de los Timberwolves, el equipo no pudo mantener el ritmo. Karl-Anthony Towns aportó 13 puntos pero no logró anotar en el primer cuarto, cuando los Nuggets lograron una racha de 14-2 para tomar una ventaja de cinco puntos.
En un intento por reducir el déficit de 16 puntos, Edwards realizó una volcada con menos de un minuto restante en la primera mitad. Sin embargo, Jokic robó el balón y alimentó a Michael Porter Jr. para otra volcada, mientras que Murray también realizó un impresionante robo, se giró y lanzó un tiro desde más allá de la línea de mitad de cancha, consiguiendo un estupendo triple y dejando a los Nuggets en el descanso con ventaja de 64-49.
Con Jokic en la banca debido a problemas de faltas, Murray tomó la iniciativa, anotando 12 puntos en el tercer cuarto para mantener a los Nuggets al frente. Cuando Jokic regresó al juego, anotó 16 puntos más en el último cuarto, asegurando la victoria para los Nuggets.
Este emocionante encuentro es un testimonio del impresionante talento y la competitividad en la NBA. La habilidad de los Nuggets para recuperarse después de dos derrotas iniciales en casa y ganar dos partidos consecutivos en la cancha de los Timberwolves demuestra su fortaleza como campeones defensores. La serie ahora está igualada 2-2 y se prevén más partidos emocionantes en el futuro.