El ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Luis Murillo, en la Conferencia Anual de Washington, un evento organizado por el Departamento de Estado de EE.UU. y el Consejo para las Américas (COA), defendió la decisión del presidente colombiano, Gustavo Petro, de romper las relaciones con Israel.
El canciller colombiano explicó que la decisión de romper relaciones con Israel se tomó después de un análisis exhaustivo y, aunque la catalogó de difícil, dijo que era inevitable ante las violaciones constantes al derecho internacional humanitario por parte del régimen israelí en la Franja de Gaza. «Israel debe cumplir con las leyes internacionales, las decisiones del Consejo de Seguridad de la ONU. Lo que está en juego es ese orden internacional que todos debemos cumplir», subrayó Murillo.
El titular diplomático colombiano enfatizó que Colombia ha observado que, en la guerra en Gaza, Israel no ha tomado en cuenta la necesidad de «diferenciar a la población civil«, «tomar precauciones» y la «proporcionalidad en la retaliación y cuál es su límite». Señaló que, desde que Israel inició el 7 de octubre sus ataques a la población de Gaza, «el presidente Petro ha sido muy claro en su posición sobre el conflicto entre Israel y Palestina». Añadió que para Bogotá «es muy importante que el gobierno de Israel cumpla con el derecho internacional humanitario, […] porque lo que está ocurriendo es inaceptable».
Gustavo Petro, el presidente colombiano, decidió romper relaciones con Israel la semana pasada como protesta a sus acciones bélicas en la Franja de Gaza, que considera un “genocidio”. El jueves pasado, las autoridades colombianas entregaron una nota verbal al embajador de Israel en Bogotá sobre la decisión que implica la salida del personal diplomático, mientras se mantendrá la atención consular.
Esta decisión de Colombia ocurre en medio de múltiples denuncias contra el régimen israelí en Gaza, donde el saldo de muertos por los bombardeos israelíes suma más de 34 700, en su mayoría mujeres y niños. Además, se denuncia una situación de hambruna debido al férreo bloqueo a la entrada de ayuda humanitaria.
El tema de las relaciones bilaterales entre Colombia e Israel ha tomado relevancia debido a la posición de condena que ha tomado el gobierno colombiano ante los ataques israelíes en la Franja de Gaza. Esta decisión representa un giro en la política exterior de Colombia, que históricamente ha mantenido una postura neutral en el conflicto árabe-israelí. Aunque la decisión ha sido controversial, el gobierno colombiano ha defendido su postura argumentando el respeto al derecho internacional humanitario.