El mundo de los automóviles ha sido testigo de varios adioses durante este año 2024. Uno de los más inesperados ha sido el del Hyundai i20 N, el hot hatch de la marca surcoreana. En un movimiento que ha sorprendido a muchos, Hyundai ha decidido poner fin a la producción de este modelo y de otros dos, el i30 N y el Kona N, al menos en Europa. La gama de altas prestaciones de la firma surcoreana se reserva ahora para modelos eléctricos como el Ioniq 5 N.
La historia del Hyundai i20 N está estrechamente vinculada a la imagen que Hyundai tiene en el campeonato de rallys WRC. Primero fue el i30 N, derivado del i30 TCR, y luego vino el i20 N, ambos modelos de combustión interna que hablan de la experiencia de Hyundai en competiciones de motor. Pero lo que hace especial al i20 N no es solo que se inspiró en los éxitos de Hyundai en el WRC, sino que el propio Thierry Neuville, piloto oficial de la marca en el WRC, estuvo implicado en las pruebas y el ajuste de este coche.
Otro aspecto a destacar es que el i20 N se despide después de que lo hiciera su competidor más directo, el Ford Fiesta ST. Ambos eran hot hatches con alrededor de 200 caballos de potencia, pero en comparación, el Hyundai era un poco más dinámico y más efectivo para tandas en track days. Sin embargo, su puesta a punto era posiblemente más dura para rutas o carreteras de montaña, a diferencia del Fiesta ST, que se apoyaba en su excelente chasis.
Hyundai dejó de producir el i20 N, un verdadero cohete de bolsillo con 200 caballos de potencia y un peso en vacío de solo 1.190 kilogramos. Ahora, los pocos utilitarios deportivos que sobreviven son el Volkswagen Polo GTI y el Abarth 595.
El cambio hacia el Ioniq 5 N, con un precio inicial de 78.000 euros, no es comparable al atractivo de tener el juguetón (¡y ligero!) i20 N por menos de 30.000 euros. Por eso, tener una de estas unidades puede convertirse en un tesoro, como ha ocurrido en los últimos años con los coches que han surgido o están relacionados con los rallys, compras pasionales con las que uno quiere emular a sus héroes de turno como Neuville, Dani Sordo, Tänak, Lappi o el malogrado Breen.
Parece obvio que este cambio es el resultado directo y comprensible de la deriva del mercado hacia los vehículos eléctricos. Si hay un sucesor para el i20 N, podría ser algo parecido a un Hyundai Ioniq 3 N, dado que se espera que el Ioniq 3 llegue durante 2025.
El i20 N sigue vivo en los rallys en España. De hecho, en este mismo año 2024, Hyundai lanzó la Copa i20 N Rallys en España con una decena de unidades preparadas por Sports & You que compiten en diferentes rallys de asfalto del país. A pesar de haber dejado de producirse, el i20 N ha demostrado ser un coche muy efectivo y rápido en las manos adecuadas, incluso en la categoría Grupo N, que ofrece pocas posibilidades de ajustes.
En conclusión, la partida del Hyundai i20 N es un acontecimiento significativo en la industria automotriz, pero a la vez es un reflejo de la transición hacia los vehículos eléctricos. Aunque se echará de menos la presencia de este deportivo asequible, su legado seguirá vivo en las carreteras y en los circuitos de rally.
