En la actualidad, la escudería Visa Cash App RB se encuentra en medio de una disputa interna con respecto a las opciones del piloto australiano, Daniel Ricciardo, para permanecer en el equipo hasta el final de la temporada. Esta situación, que involucra a varios personajes clave de la escudería, ha generado una serie de especulaciones sobre el posible desenlace.
Laurent Mekies, director de la escudería, ha expresado su deseo de hacer todo lo posible para que Ricciardo se sienta a gusto con el VCARB 01. Como parte de esta estrategia, le concedieron un nuevo chasis en China. Sin embargo, Mekies también enfatizó que su paciencia para esperar buenos resultados tiene un límite. A pesar de los avances mostrados por Ricciardo en Shanghai, no pudo terminar la carrera debido a una colisión causada por Lance Stroll.
Ricciardo, un ganador de ocho grandes premios, ha estado bajo la lupa debido a su rendimiento en comparación con Yuki Tsunoda. A pesar de su experiencia y éxitos previos, Ricciardo no ha sido capaz de demostrar superioridad en el circuito, lo que ha aumentado las dudas sobre su permanencia en el equipo.
Contrastando con la postura de Mekies, Peter Bayer, CEO de la escudería, tiene una visión diferente. Bayer ha expresado su preocupación sobre la situación con los pilotos del programa Red Bull. En particular, Bayer ha señalado que Liam Lawson, el actual piloto de reserva de RB, tiene una cláusula en su contrato que le concede la liberación automática en caso de no obtener un asiento a tiempo completo para 2025.
Para Bayer, es preferible observar a Lawson en acción esta misma temporada para sacar conclusiones sobre su futuro inmediato, en lugar de seguir insistiendo con Ricciardo, quien ya es un veterano. Este punto de vista pone de manifiesto un conflicto de intereses dentro de la escudería, ya que Mekies se alinea con Christian Horner y Bayer con Helmut Marko.
El plan inicial era evaluar a Ricciardo para determinar si su nivel era el adecuado para volver a Red Bull Racing en lugar de Sergio Pérez. Sin embargo, dada la persistente irregularidad en el rendimiento de Ricciardo, esto parece cada vez menos probable. Además, si el contrato de Pérez es renovado y Lawson decide irse a otro equipo, insistir con Ricciardo tendría aún menos sentido.
En este contexto, las especulaciones sobre un ultimátum a Ricciardo parecen ser ciertas. Estas recientes declaraciones aumentan la presión sobre el piloto australiano, cuyo plazo para mostrar mejorías está avanzando y parece estar cerca de concluir. Ricciardo, por lo tanto, necesita un gran resultado en el Gran Premio de Miami para fortalecer su posición dentro del equipo y justificar la petición de Horner de darle otra oportunidad, a pesar de haber sido despedido de McLaren por bajo rendimiento.
En palabras de Peter Bayer, «Con Liam Lawson en la reserva, obviamente tenemos a un piloto fuerte en el equipo al que por contrato se le permite irse si no consigue un asiento con nosotros en 2025. En ese sentido, sería emocionante si pudiéramos verlo en la Fórmula 1 este año para tener una imagen aún más clara. Daniel [Ricciardo] ha estado bajo presión, sabe que es crucial este año para su futuro. Fue más rápido en China, pero debe confirmarlo. Su forma irregular debe estabilizarse, de lo contrario, corre el riesgo de perder su asiento para 2025 e incluso potencialmente durante esta temporada. Helmut [Marko] ha sido claro al respecto, no dudará en poner a Lawson en el asiento para saber cuánto vale a largo plazo».